Tras los pasos del Aquinate – guía histórico-turística a los lugares de Santo Tomás de Aquino

I. Introducción

“Algunos medios para ayudar a nuestra formación intelectual y cultural, además del estudio personal, están dados por… peregrinaciones, visitas culturales, viajes, etc.” [1]

Santo Tomás de Aquino fue sin lugar a duda un gran teólogo −sino el más grande− que defendió y explicó las verdades divinas de la fe con encumbrada maestría al punto que le mereció el título de “Lumbrera de la Iglesia y del mundo entero”[2]. La suya fue, “antes que [la] metodología técnica de un maestro”, aclaraba San Juan Pablo II, “la metodología del Santo, que vive en plenitud el Evangelio, en el que la caridad es todo. Amor a Dios, fuente suprema de toda verdad; amor al prójimo, obra maestra de Dios; amor a las cosas creadas, que son también cofres preciosos llenos de tesoros que Dios ha volcado en ellas. Esa fue la fuerza inspiradora de todo su afán de estudioso y el impulso secreto de su donación total como persona consagrada. Efectivamente, el gigantesco esfuerzo intelectual de este maestro del pensamiento estuvo estimulado, sostenido y orientado por un corazón henchido de amor a Dios y al prójimo. ‘Per ardorem caritatis datur cognitio veritatis[3][4].

El estudio de las obras del Aquinate que ‘iluminó más a la Iglesia que todos los otros doctores’[5] y la veneración de sus ejemplos de vida santa, lo convierten no solo en santo principalísimo de nuestro Instituto, sino que de alguna manera su doctrina y su virtud, le infunden a nuestro modo de vivir y de hacer apostolado un estilo particular que nos define dentro de la Iglesia. Al punto que podemos decir que sin la formación filosófica tomista no seríamos sino una caricatura de lo que un religioso del Verbo Encarnado debe ser.

En efecto, sus obras se hallan citadas en todos los documentos que conforman el derecho propio y en la inmensa mayoría de los escritos del Fundador, que conjuntamente conforman el patrimonio del Instituto. Además, la deliberada intención de una formación tomista ha dado lugar a uno de los elementos no negociables adjuntos al carisma según lo exige de nosotros el fin específico del Instituto con el propósito de discernir entre los elementos de una cultura determinada qué corresponde y puede ser asumido por el Evangelio para aceptarlo y qué no, para rechazarlo.

Una sólida formación tomista que se alcanza no solo por el estudio personal y profundo de su vida y obra, pero también, en su medida, cobra dinamismo con las “peregrinaciones, visitas culturales, viajes, etc.”[6] me complace en presentar la Guía histórico-turística especialmente preparada por la Familia Religiosa del Verbo Encarnado siguiendo las huellas del “apóstol de la verdad”[7].

La presente Guía ha sido cuidadosamente ilustrada con mapas a todo color de los lugares más relevantes en la vida del santo y con fotos de los monumentos, obras de arte y detalles a los que dirigir la atención durante la visita y que harán todavía más enriquecedora la experiencia.

Además, se indica la información de contacto, con una breve reseña de lo acontecido en el lugar, detalles importantes a tener en cuenta, horarios de visitas y una buena lista bibliográfica a la que se puede consultar. Se incluye, además, un apéndice que contine una línea del tiempo de la vida del Aquinate. Todo lo cual confiamos contribuirá a hacer de la peregrinación un caminar en fe hacia Dios.

Recientemente el Papa Francisco se refirió a Santo Tomás de Aquino como el “más ilustre Doctor de la santidad y el estudio de la sagrada doctrina”[8]. Dentro de este marco, elevamos nuestras preces para que siguiendo las huellas de este insigne “hombre de Iglesia”[9] peregrinemos siempre en busca de la Verdad apoyados en el báculo de nuestra fe y de su excelsa doctrina.

Que María Santísima, la Virgen Peregrina, nos acompañe y ayude siempre a fin de que corriendo hacia la meta[10] también nosotros alcancemos de su Divino Hijo lo que Santo Tomás pedía: “Concédeme, te ruego, una voluntad que te busque, una sabiduría que te encuentre, una vida que te agrade, una perseverancia que te espere con confianza y una confianza que al final llegue a poseerte”.

P. Gustavo Nieto, IVE

II. Breve Biografía

Santo Tomás de Aquino, nació en el castillo de Roccasecca alrededor del año 1225. Fue el sexto hijo de la familia de los Condes de Aquino.

Cuando tenía 5 años fue enviado a estudiar al monasterio benedictino de Montecassino. A los 16 años fue a la universidad de Nápoles (1239-1244) para estudiar artes liberales. Allí decidió ingresar a la orden de Predicadores.

Santo Tomás se enfrentó a la oposición de sus familiares, quienes pensaban que debía convertirse en un influenciable abad en Montecassino. Deciden retenerlo en los castillos de la familia de Monte san Giovanni Campano y Roccasecca (1244-1245).  En 1245 regresa con los Dominicos. Continuó sus estudios en París y Colonia durante 11 años más.

En 1256 Santo Tomás recibió la acreditación como teólogo y comenzó su carrera como profesor. Enseñó en París, Nápoles, RomaOrvietoAnagni y Viterbo.

Tomás trabajó generosamente a lo largo de su vida y sus días terminaron en un peculiar silencio. El 6 de diciembre de 1273 con motivo de una experiencia mística dejó de escribir. Cuando se le preguntó las razones por las cuales decidió dejar la pluma, respondió: “Comparado con lo que he visto, todo lo que he escrito no es más que paja.”

Luego de este episodio su salud se debilitó notablemente, sus superiores le impusieron un período de descanso en el castillo de san Severino, residencia de invierno su hermana Teodora a las afueras de Salerno.

En enero de 1274 fue invitado por Gregorio X al Concilio de Lyon. Durante el camino sufrió una insólita enfermedad. La Condesa de Ceccano, su sobrina, lo acogió en el castillo de Maenza. Santo Tomás muere el 7 de marzo de 1274, en la cercana abadía cisterciense de Fossanova.

Los restos mortales del santo permanecieron en Fossanova cerca de 100 años. En dos ocasiones las reliquias del Angélico fueron trasladadas a Fondi, a la residencia del conde Onorato.

El maestro general de los dominicos, Elia Raymond (1367-80), se encargó de recuperar las reliquias del santo. Luego de conservarlas en el convento dominico de Fondi durante un breve periodo de tiempo, las trasladaron vía Viterbo y Orvieto hasta Francia, y descansan finalmente en Toulouse, donde llegaron el 28 de enero de 1369.

En 1585 se encontró en la abadía de Fossanova una reliquia de la cabeza de santo Tomás. Actualmente es venerada en la catedral de Priverno.

III. Lugares tomistas en Italia

A. Roccasecca d’Arce

Roccasecca d´Arce se encuentra en el corazón de la moderna provincia de Frosinone. Su historia está profundamente ligada a su posición geográfica, ya que esta región en el medioevo formaba parte de la Terra di Lavoro[11].

  1. Historia
  2. Iglesia de santo Tomás
  3. Castillo de los condes de Aquino
  4. Estatua de santo Tomás

1. Historia

La familia D’Aquino[12] era de origen longobardo, tiene históricamente como progenitor a Rodiperto, que en el año 887 recibió de Adenolfo, conde y luego príncipe de Capua, el cargo de Gastaldo D’ Aquino, título que comportaba las funciones de milicia y justicia. Uno de sus descendientes, Rinaldo I, fue señor de Roccasecca d´Arce y Monte San Giovanni (1157-1169). De esta rama desciende santo Tomás, hijo de Landolfo D’Aquino[13].

La fecha de nacimiento de Santo Tomás se calcula, por aproximación, a partir de su muerte. Actualmente parece haber un cierto acuerdo en situar la fecha de nacimiento en los años 1224/1225[14].

Su primer biógrafo, Guillermo da Tocco relata el anuncio del nacimiento de Tomás de la siguiente manera:

Cuando su madre Doña Teodora, reconocida tanto por la pureza de sus costumbres como de su  linaje, se encontrara en Roccasecca, en los confines del Reino de Campaña, vino a ella en espíritu un hermano, Bueno de nombre, y de mejor vida y religión, que durante mucho tiempo llevara vida eremítica junto a otros en el monte de dicha Roca , y que era considerado santo por los hombres de aquella región, y le dijo: “Alégrate Señora, porque has concebido, y parirás un hijo al que llamarás Tomás; y tú y tu marido querrán para él que se haga monje en el Monasterio de Montecassino, en el que reposa el cuerpo de San Benito, con la esperanza de que vuestras cuantiosas rentas concedidas a dicho monasterio hagan llegar a vuestro hijo al más alto grado de la prelatura. Pero Dios dispondrá de ello otra cosa, porque será hermano de la Orden de Predicadores, y de tan notable ciencia y santidad de vida, que en el mundo no podrá encontrarse otro igual en su época”. A lo cual respondió la Señora: “No soy digna de parir tal hijo; que haga Dios según el beneplácito de su voluntad”.  Y todo aquello que proféticamente fuera dicho, se cumplió verazmente; en efecto, inmediatamente se hizo patente la fecundidad de la madre y la alegría del recién nacido, imponiéndosele el nombre que ya se dijo, y que estaba contenido en aquella visión, para que no se dudara de que se habrían de cumplir en el niño todas las cosas que habían sido anunciadas a modo de promesa[15].

Anuncio del nacimiento de Tomás

Es difícil conocer en profundidad al padre de Tomás y su familia, no obstante se sabe que Landolfo se casó con Teodora, dama que pertenecía a la rama Rossi de la familia napolitana de Caracciolo, y tuvo al menos nueve hijos, de los cuales cuatro niños: Simón, Reinando, Landolfo, Tomás; y cinco niñas: Marotta, quien luego fuera abadesa del convento de santa María de Capua, Teodora, esposa de Roger, conde de san Severino, María, Adelasia y se ignora el nombre de la quinta hermana pues murió en la primera infancia, alcanzada por un rayo del cual se salvó el pequeño Tomás que dormía al lado de su nodriza[16]. Así nos llega el relato del incidente:

Sucedió pues que, en aquel mismo castillo, como se levantara de repente una horrible tormenta en el aire, un rayo cayó sobre la torre y acabó con la vida de la hermana del niño, y de los caballos que estaban en el establo. La madre, que tenía más solicitud por el cuidado del niño que por el de la niña, llegó temerosa al lecho en el que dormía la nodriza con el infante, y habiéndolo encontrado sano en sus manos, dio gracias a Dios quien paulatinamente comenzaba a cumplir en su hijo lo que había prometido[17].

 

En abril de 1244 Tomás recibió el hábito dominicano en Nápoles. Estando su familia en desacuerdo, su madre envió a su hijo Rinaldo y a Pier delle Vigne a interceptar al Santo en Acquapendente. Allí lo capturaron, lo subieron a un caballo y lo llevaron a Monte San Giovanni, un castillo familiar al norte de Roccasecca. Permaneció un breve período en este lugar, siendo trasladado rápidamente de vuelta a Roccasecca. Estando allí, toda la familia se empeñó en que Tomás cambiase de idea, pero sería un error si lo imaginásemos maltratado, se trataba de una estadía forzada más que de una prisión. Tomás podía entrar y salir, recibir visitas, hablar con sus hermanas: fue entonces cuando convenció a su hermana Marotta de convertirse en religiosa. Tocco refiere que en esta ocasión aprovechó para rezar, leer toda la Sagrada Escritura y estudiar el libro de las Sentencias de Pedro Lombardo[18].

2. Iglesia de Santo Tomás

  • GOOGLE MAPS: Iglesia de Santo Tomás
  • Dirección: Largo Arciprete, 1, 03038 Roccasecca FR.
  • Horario: establecer mediante cita previa.
  • Contacto: Ángelo Ciampa.
  • Teléfono (WhatsApp): +393203480383.
  • Obs.: la iglesia permanece cerrada la mayor parte del tiempo, por lo cual es aconsejable llamar al guía al menos dos días antes para coordinar la visita. Se puede también celebrar Misa avisando con anticipación. La iglesia y el castillo se encuentran en el mismo predio, por tanto, es conveniente leer las Obs. que se encuentran en la página 28.

Primera Iglesia dedicada a Santo Tomás

La iglesia de santo Tomás en Roccasecca fue la primera edificada en su honor, entre los años 1323 y 1325. Se construyó con estilo gótico, utilizando piedra local. Fue destruida por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial junto con el convento dominicano que se encontraba contiguo a la misma. Quedó en pie sólo el campanario.

La reconstrucción comenzó en 1972, y la iglesia fue reabierta en 1980. Su planta rectangular tiene 20 metros de longitud y 10 metros de ancho y está dividida por un arco a medio punto. El presbiterio alberga varios frescos del siglo XV de la Iglesia de San Pietro a Campea, todos ellos son la escuela casinense, entre los cuales destaca el de san Miguel Arcángel, representado con una vara en la mano derecha y una balanza en la izquierda[19]. La pared del fondo del presbiterio, a la izquierda, posee un nicho en el que destaca un delicado fresco de finales del siglo XV que representa a la Virgen del Rosario con el Niño.

Interior de la Iglesia

A la derecha de la fachada de la iglesia se levanta el campanario hermoseado por una luneta que protege un fresco del año 1477, que representa al santo Doctor.

Campanario

3. Castillo de los condes de Aquino

  • GOOGLEMAPS: Castillo de los condes de Aquino
  • Dirección: Largo Arciprete, 1, 03038 Roccasecca FR.
  • Horario: Sin restricciones
  • Obs.: al ser ruinas, no hay horario específico de visita. Debido a la ubicación y al tipo de terreno se recomienda visitarlo con calzado cómodo, ya que se accede subiendo una pequeña colina. Si se ha contactado a Ángelo para entrar en la Iglesia conviene pedirle también que acompañe la subida al castillo.

Sobre la falda del monte Comario, apéndice del monte Cairo, a más de 500 metros de altura, se alzan las ruinas del castillo medieval conocido como el Castillo de los condes de Aquino.

Ruinas del Castillo de los Condes de Aquino

En el 994, Guido, de la familia de los Conde D’Aquino y conde de Pontecorvo, donó a Mansone, abad-barón de Montecassino, el monte Asprano y la iglesia de Sant’Angelo. Un año después, Mansone construyó una fortaleza denominada “seca” a causa de la escasez de agua, como lugar de avistamiento para defensa de la abadía de Montecassino. Esta fortaleza poseía un valor estratégico importante, porque se encontraba en el límite entre los estados pontificios y los territorios del emperador Federico II, que se disputaban, entre otras cosas, el poder sobre la abadía de Montecassino. Tal situación político-geográfica condenaba a la familia de Tomás a oscilar constantemente entre el papa Gregorio IX y el Emperador, lo que implicaba inevitables conflictos[20].

Plaza de armas del Castillo de los Condes de Aquino

La entrada principal del castillo se ubicaba en el lado oeste. En el centro había un torreón circundado de gruesos muros, dentro de los cuales se encontraban casas de guardia para la guarnición y grandes refugios, utilizados en caso de peligro. Algunos de los edificios servían de establos y depósitos de alimentos y combustible.

La residencia de los condes se trasladaba al torreón en tiempos de asedio, a cuya parte superior se accedía mediante escaleras replegables desde el interior. Las torres que reforzaban la muralla externa poseían las mismas características[21].

Fuera de las murallas se alza una torre de vigilancia circular, recientemente restaurada, conocida como del cannone (del cañón). Se trata de una fortificación muy alta construida como mirador y punto de defensa.

Durante mucho tiempo se afirmó que esta torre fue morada de Santo Tomás durante el tiempo de cautiverio, pero estudios recientes demuestran que la construcción de la Torre del cannone es posterior.

Torre del Cannone

A la derecha del ingreso a la plaza de armas se encuentran las ruinas de la capilla familiar, dedicada a la Santa Cruz. No deja de ser notoria la devoción de los Condes D’ Aquino a la Santa Cruz, ya que edificaron también una iglesia con el mismo nombre en Aquino. Es probable que en esta capilla haya sido bautizado santo Tomás.

Vista panorámica donde se ven las ruinas de la Iglesia del Castillo

A pocos metros de la muralla del castillo se encuentra otra iglesia, que durante muchos siglos fue la iglesia principal del burgo. Hoy se la conoce como “de la Santa Croce” y ha sido restaurada completamente.

Capilla de la Santa Cruz

4. Estatua de santo Tomás

  • GOOGLEMAPS: Estatua de santo Tomás
  • Dirección: Statua di San Tommaso,  Via S. Maria Nuova, 16, 03038 Roccasecca.
  • Obs.: si bien la estatua se encuentra al ingreso del pueblo, recomendamos visitarla al final de recorrido para poder dedicar más tiempo al castillo.

Al ingreso del pueblo se encuentra la estatua de Santo Tomás, realizada enteramente con piedra local por manos de Giuliano Vangi. Mide 8 metros de altura y fue dedicada al Santo en el Año Jubilar del 2000 por el gobierno local[22].

Estatua de santo Tomás del artista Giuliano Vangi

B. Aquino

Aquino es un municipio de la provincia de Frosinone situado en la región del Lacio en Italia, a 12 km al oeste de Cassino.

  1. Historia
  2. El castillo medieval de Aquino: la casa de santo Tomás.
  3. El Vallone D’Aquino.
  4.  Basílica concatedral santos Constancio obispo y Tomás de Aquino.
  5. Iglesia de santa María della Libera.

1. Historia

La mayor parte de los biógrafos de nuestro santo se inclinan por la tesis de que nació en el castillo de Roccasecca, sin embargo, hay quienes sostienen que haya nacido en Aquino.

Hay registros históricos que testimonian la residencia de la familia D’Aquino en estas tierras desde el año 887. Una primera rama de la familia quedó en posesión del condado de Aquino hasta 1137, de ella trae Tomás su patronímico[23].

Se afirma que Tomás visitó Aquino cuando se disponía a emprender su viaje a Francia para participar del Concilio de Lyon, al cual no pudo llegar dado que la muerte lo encontró antes de su arribo. Se conserva en Montecassino la carta que, en esa ocasión Tomás escribió desde Aquino al abad de Montecassino[24].

Pueblo de Aquino

2. El castillo medieval de Aquino: la casa de santo Tomás

El complejo del Castillo se encuentra en el sector sureste de la ciudad, incluye la torre pseudo-cuadrada, también llamada maschio, la cual fue construida para defender el lado oriental, el único desprovisto de defensas naturales, incluye el Palazzo Comitale, la llamada Casa de Santo Tomás de Aquino, la plazoleta y otras estructuras residenciales y de servicio que se extienden a lo largo de una imponente pared rocosa de travertino[25].

Reconstrucción del castillo de Aquino[26]

El castillo ideado originalmente como una fortaleza, fue construido en el siglo X por orden de Atenolfo II.  Desde finales del siglo XIII comenzó a desarrollarse un verdadero centro en torno al palacio.

En el siglo XVIII, con la construcción de la catedral de san Costanzo Vescovo, la torre se conviertió en campanario. La catedral fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial.

 

Reconstrucción 3D del castillo de Aquino[27]

En la fachada de la casa de santo Tomás puede observarse dos ajimeces (ventanas de doble abertura en la parte superior) que datan de los siglos XIV y XV: una de ellas de estilo gótico, la otra, de estilo aragonés-catalán.

De esta casa sólo puede visitarse una amplia sala que contiene una exposición de imágenes que representan la vida del Santo.

Ventanas de la casa de Aquino

Desde del palacio se desarrollaba el sistema defensivo consistente en dos murallas concéntricas realizadas con grandes bloques de travertino, material extraído de la antigua ciudad romana o procedente de canteras cercanas.

Vista planetaria de la cuidad de Aquino[28]

En la parte más baja del asentamiento se pueden ver los restos de la gran torre cilíndrica, donde se alzaba Porta Fístula. Esta torre fue construida para defender un pasadizo que permitía cruzar un curso de agua, aprovechando un cuello de botella formado en los terraplenes de forma natural. Este pasadizo no se distingue con facilidad debido a las actuales construcciones, pero habría estado ubicado en los que hoy es el ingreso al Parque Natural e Histórico del Vallone[29].

Torre pseudo-cuadrada

3. El Vallone D’Aquino

El Vallone es actualmente un parque que ocupa la explanada que se extiende al pie del castillo medieval de Aquino. El parque alberga partes de unas canteras romanas de siglo I.

Esta explanada fue antiguamente un espejo de agua utilizado para la defensa del castillo. Con este fin se había hecho correr hacia allí las aguas de un lago cercano, hoy en día inexistente.

Vallone d’Aquino

4. Basílica concatedral santos Constancio obispo y Tomás de Aquino

La actual iglesia catedral, dedicada a san Constancio, obispo de Aquino del siglo VI, es una reconstrucción posterior a la Segunda Guerra Mundial, en la que el edificio original fue destruido. En el año 1974 dedicaron la catedral también a santo Tomás de Aquino, con motivo del séptimo centenario de la muerte del Doctor Angélico. El papa san Pablo VI visitó Aquino ese mismo año y elevó la catedral a Basílica Menor.

Basílica concatedral santos Constancio obispo y Tomás de Aquino

La catedral tuvo cinco edificaciones distintas. Se sabe que la iglesia original pervivió al menos hasta el año 1137, y estaba dedicada a san Pedro. Posteriormente existió un edificio consagrado a santa María de los Ángeles, y luego otro dedicado a san Constancio, aunque no se conocen las fechas precisas.

En el año 1664, debido a que la zona cercana se había despoblado, se trasportó la catedral a una pequeña Iglesia dedicada a san Pedro, cerca de la rivera izquierda del riachuelo Lesogne. Allí trasladaron la reliquia de san Constancio. El lugar corresponde hoy al Vallone d’Aquino. La cuarta catedral se ubicaba en el área entre la torre medieval y el monumento a la Inmaculada y fue destruida el 14 de julio de 1944 en un bombardeo. Diez años después el 6 de junio de 1954, se comenzó la reconstrucción de la nueva catedral en la posición actual y las obras duraron varios años. El 19 de octubre de 1963 fue la solemne consagración, rito que fue precedido del obispo diocesano Mons. Biagio Musto. Los huesos de San Constancio que habían sido encontrados después del bombardeo fueron colocados en la nueva iglesia[30].

Con motivo de la consagración de la nueva Catedral de Aquino, la Iglesia de Toulouse (Francia) donó a la Iglesia de Aquino la reliquia de la costilla del corazón del nostro santo[31]. Hoy en día la reliquia se encuentra incrustada en la base de una gran estatua policromada de Santo Tomás, ubicada en el lado izquierdo de la catedral.

Reliquia: Costilla de santo Tomás

Como parte de las celebraciones del centenario en 1974, se celebró el Congreso Tomista, con sede en Roma y Nápoles,  entre el 17 y el 24 de abril. Los participantes del congreso se alojaron en Aquino, entre ellos estaba el cardenal arzobispo de Cracovia Karol Wojtyla, futuro Pontífice san Juan Pablo II[32].

5. Iglesia de santa María della Libera

Iglesia de santa María della Libera

La iglesia de santa María della Libera en Aquino constituye un gran tesoro artístico de época medieval. Fue construida en el primer cuarto del siglo XII, y, aunque no todos los historiadores están de acuerdo, presenta signos que evidencian un vínculo con la iglesia abacial desideriana[33] de Montecassino.

Según una antigua tradición local había en ese lugar un antiguo templo dedicado a Hércules el Libertador, de quien procede el título de Madonna della Libera.

La iglesia actual fue hecha construir por Ottolina dell’Isola, esposa de Adenolfo D’Aquino, segundo conde de Alvito y por su cuñada María. El motivo fue el cumplimiento de un voto, aunque ambas fallecieron sin ver terminada la iglesia. Estas dos benefactoras son recordadas en el mosaico de la luneta del portal principal, donde están representadas las figuras de Ottolina, María y la Virgen y el Niño. Allí mismo a los lados de una cruz se pueden leer las iniciales: V(otum) F(ecit) [34].

Mosaico de la fachada de la Iglesia de santa María della Libera

Otro interesante detalle es el epígrafe grabado en el dintel izquierdo del portal de la iglesia. Allí se observan dos inscripciones superpuestas. La primera data del inicio de la construcción de la iglesia. La inscripción completa dice lo siguiente:

AVLA(M) DEI GENITRIX I(N)CHOA

Generadora de Dios comienza este templo.

Seguidamente, al finalizar construcción de la Iglesia, otro epígrafe fue superpuesto que dice:

A(VLAM) M(TER) D(EI) ORNA

Madre de Dios embellece este templo[35].

Epígrafe grabado en el dintel izquierdo del portal de la iglesia

Actualmente, dentro de la iglesia se pueden observar numerosos fragmentos de monumentos fúnebres reutilizados en los muros. Antiguamente estaba todo ricamente ornamentado con mosaicos cosmatéscos y un ciclo de frescos, de los cuales se observan pequeños fragmentos en las paredes.

Interior de la iglesia santa María della Libera

Al lado de la Iglesia se encuentra el Arco Honorario, de época augusta, construido a mediados del siglo I a.C.

C. Montecassino

Montecassino es una abadía benedictina situada en la cima de una colina del Valle Latino, a unos 140 km al sur de Roma y un kilómetro al oeste de la ciudad de Cassino. Se encuentra localizada en el sur de la región italiana del Lacio.

  1. Historia
  2. El Monasterio
  3. La sacristía: capilla de las reliquias
  4. El museo
  5. La biblioteca

1. Historia

La abadía de Montecassino fue el escenario de la temprana consagración a Dios de santo Tomás. Su ingreso en este monasterio se sitúa entre los años 1230 y 1231; debía tener entonces 5 o 6 años de edad[36].

Los padres de Tomás alimentaban la esperanza de que llegara a ser abad en esta abadía.

Según las costumbres vigentes en el siglo XIII, los niños sólo eran admitidos en el monasterio como oblatos[37]. La vida cotidiana de los oblatos era, con las adaptaciones propias de su edad, la vida común que regía en todo el monasterio y sabio maestro guiaba a cada uno en la vida espiritual y disciplinaria. La educación se desarrollaba por medio del aprendizaje de la lectura y la escritura que se combinaban con la enseñanza de los principios y obligaciones tanto morales como religiosos. Los ejercicios de lectura se hacían directamente de los libros litúrgicos y de la Sagrada Escritura. Los salmos eran aprendidos de memoria. La regla del santo patriarca de Montecassino era dada a los oblatos no sólo para que sirviera como ejercicio de lectura, sino también para que se imprimiera con fuerza en sus mentes. Santo Tomás recordará algunos pasajes de la regla benedictina en la segunda parte de la Summa theologiae.

El curriculum incluía gramática, retórica y dialéctica, como partes del trivium, y las nociones de la música, que formaba parte del quadrivium. Se practicaba también el arte de la escritura o caligrafía. De santo Tomás podemos decir que, aunque su escritura fuera inintelligibilis, como la han denominado los estudiosos, se rescata la musicalidad que contienen sus manuscritos, cómo señaló el grafólogo Moretti, en su análisis de la escritura del Aquinate[38]. Además de los estudios literarios latinos y de las diversas disciplinas científicas estudió también la lengua vernácula.

Ptolomeo de Lucca (1236-1327), por su parte, afirma que santo Tomás en Montecassino hizo progresos in logicalibus et naturalibus (en lógica y en ciencias naturales), estudios que ya indicaban un grado superior en las artes.

Fue en Montecassino donde Tomás se acercó a las fuentes más puras de la gracia divina. Allí probablemente recibió por primera vez a Jesús Eucaristía[39].

Lamentablemente, la paz que disfrutaba el monasterio fue perturbada por nuevas luchas entre la Iglesia y el emperador Federico II, surgidas hacia el año 1236. Landolfo, siguiendo los consejos del nuevo abad, Esteban de Corbario, decidió poner a su hijo al abrigo de problemas fácilmente previsibles.

Según Guillermo de Tocco y Bernardo Gui, el abad del monasterio, conociendo las cualidades intelectuales del joven, habría aconsejado a Landolfo que colocara a su hijo en un entorno donde pudiera dedicarse más fácilmente al estudio. Después de considerarlo juntos, los padres decidieron enviar al adolescente a Nápoles para dar allí, entonces, nuevo impulso a sus estudios. Es probable que a su llegada a Nápoles el joven Tomás permaneciera algún tiempo en el pequeño cenobio de san Demetrio, una comunidad religiosa dependiente de Montecassino[40].

Tomás dejó el monasterio casinense probablemente en la primavera de 1239. Tenía entonces 14 o 15 años y, aunque a esa edad ya hubiera podido hacer la profesión en el ordo monasticus, no hay ningún documento que lo atestigüe[41].

Santo Tomás no olvidó a sus benefactores de la niñez, y mantuvo contacto con la abadía incluso hasta en sus años de madurez, porque, en definitiva, la profunda herencia casinense lo acompañó durante el resto de su vida.

Probablemente visitó por última vez Montecassino, en febrero de 1274, de camino al Concilio de Lyon, y dejó una carta al abad Bernardo comentando un pasaje de las Moralia de san Gregorio Magno. Este opúsculo trata de la conversión de los pecadores y la presencia divina, y su doctrina es auténticamente tomista[42].

Interior de la Iglesia de Montecassino

2. El monasterio

  • GOOGLEPMAPS: Montecassino
  • Dirección: Abbazia di Montecassino, Via Montecassino, 03043 Cassino FR.
  • Horario de verano (del 1 de abril al 31 de octubre): todos los días, de 9:30 a 18:30 h
  • Horario de invierno (del 1 de noviembre al 31 de marzo): domingos, de 9:30 a 17:15 h; De lunes a sábado, de 9:30 a 16:50 h
  • Sitto web: https://abbaziamontecassino.it/
  • : Visitas guiadas: guide@abbaziamontecassino.org (reservas por mail))
  • Teléfono (WhatsApp): +390776311529 (para reservar una visita guiada)
  • Visita guiada al Complejo del Monasterio:
  • Grupos reducidos (1-5 personas), 35€ total (zona antigua incluida).
  • Grupos grandes (6 o más personas), 6€ por persona (zona antigua incluida).
  • Visita guiada al Complejo Monasterio con Entrada al Museo:
  • Grupos reducidos (1-5 personas), 45€ total (zona antigua incluida).
  • Grupos grandes (6 o más personas), 8€ por persona (zona antigua incluida) en invierno (del 1 de noviembre al 31 de marzo), el Museo solo abre los domingos y días festivos, de 9:30 a 17:15 h

Vista panorámica del Monasterio de Montecassino

El monasterio fue fundado por san Benito (480-547), y fue el centro de irradiación de su regla y su espíritu, a lo largo de una prodigiosa y fecunda historia ultra milenaria.

Fue destruido alrededor del año 577[43] por los longobardos y se reedificó a comienzos del siglo VIII, experimentando un periodo de gran esplendor hasta el 883, cuando las hordas sarracenas lo devastaron nuevamente[44]. En el siglo XI alcanzó el monasterio su mayor lustre.

En el año 1349 un violento terremoto lo echó al suelo; sin tardanza se inició la reconstrucción que le dio un monumental y precioso aspecto en que se conservó hasta 15 de febrero de 1944, fecha en que se produjo el conocido bombardeo que lo destruyó totalmente[45]. Cuanto hoy podemos observar ha sido reconstruido desde los cimientos, a excepción de la parte inferior de la esquina sudoeste.

Montecassino

El cenobio tiene forma de cuadrilátero irregular (200 m x 100 m aprox.), y domina el monte y toda la amplia y fértil llanura del Casinese cual majestuosa ciudadela del espíritu. La iglesia, de espléndido estilo barroco, alberga los restos mortales de san Benito y de su hermana santa Escolástica.

Claustro superior

3. La sacristía: capilla de las reliquias

  • Horario: solo los miércoles, con entrada.
  • -Grupos reducidos (1-5 personas), 18€ total.
  • -Grupos grandes (6 o más personas), 3€ por persona.
  • -Grupos reducidos (1-5 personas), incluyendo la visita guiada y la visita a la sacristía, el coste total para el grupo es de 45,00 €.
  • -Grupos grandes (6 o más personas), incluyendo la visita guiada, el museo y la sacristía pagan 9,00 € por persona.

Sacristía

En la base de la escalera que sale al presbiterio, hacia la izquierda se encuentra la Sacristía. En cuanto a su valor artístico, se destacaa la decoración de madera, reproducción de la que fue destruida en el siglo XVIII. Por encima del altar hay un Crucifijo de la escuela sienesa, de finales del siglo XIV, colocado entre sendas imágenes de los apóstoles Pedro y Pablo. Sobre el sagrario se conserva una venerable Reliquia de la Santa Cruz. En las paredes laterales, numerosos relicarios albergan preciosos restos de numerosos santos. Entre ellas se destaca la reliquia de primer grado de santo Tomás de Aquino.

Reliquia de santo Tomás

En el VI centenario de la canonización del Aquinate, celebrado en 1924, se le dedicó una capilla. Ésta se restauró y adornó con un retablo pintado por Arduino Scaccia de Veroli. La capilla y el retablo desaparecieron el trágico 15 de febrero de 1944.

Al igual que santo Tomás de Aquino permaneció espiritualmente unido a la herencia religiosa de Montecassino, los monjes de san Benito custodian perpetuamente la memoria casina del insigne hijo de santo Domingo[46].

4. El museo

  • Horario de verano (del 1 de abril al 31 de octubre): todos los días de 9:30 a 18:30 h
  • Horario de invierno (del 1 de noviembre al 31 de marzo): abierto solo los domingos y festivos, de 9:30 a 17:15 h
  • Correo electrónico: guide@abbaziamontecassino.org (para reservar una visita guiada).
  • Teléfono (WhatsApp): +390776311529 (para reservar una visita guiada).
  • Entrada al museo (sin visita guiada), 6€ por persona.

Museo

Saliendo de la Iglesia hacia la derecha, se encuentra la entrada al Museo. Éste está dividido en dos plantas y ofrece al visitante un testimonio de las diversas fases de la historia y del arte del monasterio.

La sede actual del museo se fundó en 1980 y se ha ido renovando continuamente a lo largo de los años. La oferta expositiva no es monotemática, sino que reúne en una misma estructura varias secciones que abarcan un periodo de tiempo que va aproximadamente desde el siglo VI a.C. hasta nuestros días. Posee una sección arqueológica, otra medieval y por último una de miniaturas y estampas: aquí se exponen algunos ejemplares de manuscritos y libros impresos conservados en los archivos de la abadía. También hay una sección dedicada a la pintura, la orfebrería y los ornamentos sagrados.

4. La biblioteca

  • Horario: Las visitas son consentidas mediante una reserva, ya sea llamando al número de telefono o enviando un mail, solo a quienes presenten motivos de investigación.
  • De lunes a viernes de 9:30 h a 13: 30 h.
  • Email: bmn-mnc@beniculturali.it.
  • Teléfono (WhatsApp): +390776 311529.

Interior de la biblioteca

Los orígenes de las colecciones se remontan a la primera mitad del siglo VI. La mayoría de los manuscritos conservados en la biblioteca fueron realizados en el propio scriptorium de la abadía, por lo que constituyen un raro ejemplo de desarrollo orgánico de una colección de biblioteca. La colección de libros impresos antiguos, por su parte, son el resultado de una campaña de ampliación de los fondos llevada a cabo por los monjes cassineses en los siglos XVII-XVIII. Aún hoy, los antiguos libros impresos conservan el orden dado por los bibliotecarios de aquellos siglos. Junto al patrimonio antiguo, la biblioteca de Montecassino posee una vasta colección moderna, que se actualiza constantemente en las secciones de derecho, historia, literatura, teología, ciencias religiosas y arte.

La biblioteca posee además, el texto del último escrito atribuido al Santo, la Responsio ad Bernardum, abbatem casinensem, escrito en un margen del manuscrito de las Moralia de san Gregorio Magno[47].

La destrucción final de Montecassino por los bombardeos (1944) durante la Segunda Guerra Mundial causó daños incalculables a los fondos de la biblioteca, de los que sólo pudo salvarse una pequeña parte. Antes de la destrucción, la biblioteca tenía 120000 volúmenes, en 1955 sólo 20000.

En la actualidad, la biblioteca de Montecassino posee unos 30.000 volúmenes del fondo antiguo, es decir anteriores a 1830, unos 100.000 volúmenes de la colección moderna y 380 revistas/periódicos. Algunos códices datan de los siglos VI y VII. Entre los numerosos pergaminos cabe destacar el Placito Cassinese (960), considerado uno de los documentos más antiguos de la literatura italiana.

D. Monte san Giovanni Campano

El monte san Giovanni Campano está situado en la zona de los Montes Ernici, a 438 metros sobre el nivel del mar. Sobre su cima y laderas se ubica la ciudad homónima, donde la familia Aquino poseía un castillo.

  1. Historia
  2. Castillo de Monte san Giovanni Camoano

1.   Historia

Aquí santo Tomás pasó un tiempo de reclusión impuesto por su familia, durante el cual sus hermanos intentaron disuadirlo de su decisión de ser religioso dominico.

Cuenta Guillermo de Tocco, que estando aquí introdujeron en la habitación de Tomás una prostituta para inducirlo al pecado. Al verla, el Santo tomó un tizón ardiente con el cual la echó fuera de su habitación. Luego de haber expulsado a la joven, con el mismo tizón ardiente grabó en la pared el signo de la cruz, pidiendo a Dios la gracia de la perpetua virginidad. Mientras rezaba se durmió y aparecieron dos ángeles, quienes rodeando su cintura por ambos lados le dijeron: Te ceñimos ahora de parte de Dios con el cíngulo de la castidad que suplicaste, el cual no podrá ser disuelto en adelante por ninguna acometida; y lo que no puede ser obtenido por mérito de la humana virtud, se te concede a ti por merced de la divina munificencia[48]. Fue este un hecho permitido por la Divina Providencia para que Tomás pudiese conseguir de esta lucha un triunfo más glorioso.

Tentación

2.   Castillo de Monte san Giovanni Campano

  • GOOGLEMAPS: Castillo de Monte san Giovanni Campano
  • Dirección: Via Corte, 3, 03025 Monte San Giovanni Campano FR.
  • Horario: Solo con cita previa; con al menos tres días de antelación.
  • Contacto: Pietro Loretta (más receptivo a las llamadas que a los mensajes de texto)
  • Teléfono (WhatsApp): +39348 515 6245.
  • : La misa se puede celebrar en la capilla si se reserva con antelación.

Vista panorámica del Castillo de Monte San Giovanni Campano

La antigua residencia de los Condes de Aquino, conocida también como Castello Ducale, se encuentra en el punto más alto de Monte San Giovanni Campano. De aspecto imponente y severo, es una fortaleza de difícil acceso: antaño, en efecto, había dado al pueblo el nombre de Castelforte.

Antiguamente el castillo contaba con numerosas torres, pero a causa de dos terremotos, sucedidos en 1703 y en 1915, la mayoría de ellas ya no existen.

Entrada a la capilla d’Avalos

El castillo conserva solo dos torres, una rectangular y la otra pentagonal, ubicadas en los extremos de la muralla.

El ingreso al castillo lo constituye un portal de estilo románico.

Entrada al castillo

Los duques de Ávalos transformaron en oratorio la sala donde santo Tomás estuvo encerrado, oratorio que fue reformado varias veces. Sobre el altar se aprecia un tríptico de la escuela napolitana del siglo XVI, que antiguamente se encontraba ubicado en un nicho en la pared. Cada pintura representa un episodio diferente de la vida del santo:

Interior de la Capilla d’Avalos

                                             

El cuadro central muestra a santo Tomás de rodillas en el momento de recibir el cinturón de castidad por medio de cuatro ángeles que están con las manos unidas. Santo Tomás lleva el sol en el pecho y su cabeza está vuelta hacia atrás; detrás de él se aprecian las nubes sobre las que está la figura del Padre Eterno, y una cinta en la que se lee:

EX PARTE DEI TE CINGIMUS CINGULO CASTITATIS:

Te ceñimos, de parte de Dios, con el cíngulo de la castidad.

En el cuadro de la izquierda, santo Tomás está rezando a los santos Apóstoles Pedro y Pablo. Desde una nube desciende una cinta ondeante en la que está escrito:

O FELIX DOCTOR CUI DIVINAE SCRIPTURAE CAELI CLAVICULARIUS APERUIT OSTIUM:

¡Oh feliz doctor, a quien el portero del cielo abrió la puerta de las divinas Escrituras!

En el cuadro de la derecha, Santo Tomás adora un Crucifijo. Una cinta expresa las palabras que le dirige el Cristo:

BENE SCRIPSISTI DE ME THOMA:

Has escrito bien de mí, Tomás.

E. Anagni

Anagni es un municipio de la provincia de Frosinone, situado en el Lacio meridional. La antigua ciudad está ubicada en las colinas del este de Roma.

La ciudad es conocida por la tristemente famosa afrenta de Anagni. Este ultraje tuvo lugar el 7 de septiembre de 1303 en la sede pontificia de Bonifacio VIII, cuando Sciarra Colonna, el general del rey Felipe IV de Francia “el Hermoso”, abofeteó al Papa, y lo retuvo prisionero tres días.

  1. Historia
  2. Iglesia san Giacomo
  3. Catedral de santa María

1. Historia

Los dominicos fundaron un convento en Anagni en 1240, que gracias a su ubicación, serviría también como punto de encuentro para los frailes predicadores, sobre todo cuando hacían sus viajes de Roma a Nápoles y viceversa. Santo Tomás de Aquino estuvo aquí en diferentes momentos de su vida. Algunos biógrafos afirman que su primera estadía en Anagni habría sido al volver de Paris como profesor; entre los años 1259 y el 1261. Luego, hizo una breve visita algunos años después, el 8 de septiembre de 1265, con ocasión del capítulo provincial [49].

Guillermo de Tocco relata la siguiente anécdota sucedida en este lugar:

Se cuenta también del santo doctor que en el convento de Anagni el hermano Juan del Juez, hombre de gran devoción, como tuviera su celda junto a la recámara del mismo, frecuentemente lo oía hablando con alguien, y más frecuentemente disputando, aunque permanecía sin embargo allí, siempre solo y sin compañía alguna. En efecto, no hubiera sido posible de otro modo que un mismo maestro escribiera tantas verdades, si no fuera que alguno de los ciudadanos del cielo le revelara lo que debía escribir[50].

Santo Tomás en su habitación

2.Iglesia de san Giacomo

  • GOOGLEMAPS: Iglesia de san Giacomo
  • Horario: domingos, de 7:00 a 13:00 h; martes, jueves y sábados, de 16:00 a 20:00 h
  • Contacto: Don Francesco Frusone (para concertar visitas guiadas).
  • Correo electrónico: francescofrusone86@gmail.com
  • Teléfono (WhatsApp): +39 331 497 4012.
  • Secretaría parroquial: 07 75 72 5534

Fachada de la Iglesia de san Giacomo

La iglesia, dedicada a Santiago, pertenece a un convento que fue sede de una reconocida escuela de teología y filosofía durante la época de santo Tomás.

En 1770 la iglesia fue restaurada por el cardenal español Tomás de Boxadors, miembro de la Orden de Predicadores. La fachada actual, de estilo barroco, es la de la restauración. En 1873 el ayuntamiento convirtió el convento en hospital, aunque desde 1888 funciona como internado femenino con el nombre de Regina Margherita.

En el interior de la iglesia se venera una cruz que, según algunos autores, fue fabricada por santo Tomás.

La cruz de santo Tomás

La tradición cuenta que cuando santo Tomás se encontraba en Anagni enseñando elaboró una cruz en su celda como protección para los rayos. Desde la Edad Media se venera esta cruz como una defensa contra los rayos, en las grandes tormentas. Uno de sus biógrafos relata que el santo en momentos “de susto, de truenos y tormentas, se armaba como un escudo con la señal de la cruz y decía: Dios se hizo carne por nosotros, Dios murió por nosotros[51].

La cruz contiene los siguientes versos:

CRUX MIHI CERTA SALUS, CRUX EST QUAM SEMPER ADORO.
CRUX DOMINI MECUM, CRUX MIHI REFUGIUM.

La cruz es mi salvación segura, la cruz es lo que siempre adoro. Está conmigo la cruz del Señor, la cruz es mi refugio.

Cruz elaborada por santo Tomás

3.Catedral de santa Maria

  • GOOGLEMAPS: Catedral de santa Maria
  • Dirección: Via Papa Leone XIII, Anagni, FR.
  • Horario de verano (del 1 de abril al 31 de octubre): 9:00 a 13:00 / 15:00 a 19:00 h
  • Horario de invierno (del 1 de noviembre al 31 de marzo): 9:00 a 13:00 / 15:00 a 18:00 h
  • Son aconsejables las visitas guiadas al Museo y al Tesoro. La Cripta solo se puede visitar con un guía en los horarios mencionados arriba.
  • La tarifa de entrada es de 9 € por persona, pero existen varias opciones de precios para reservas de grupos más grandes (15 personas o más), para grupos de estudiantes, etc.
  • https://www.cattedraledianagni.it

Catedral de santa Maria

La catedral de santa María en Anagni, de estilo románico lombardo-emiliano, fue construida entre los años 1072-1104 a instancias del obispo Pietro da Salerno.

En el exterior, su majestuosa fachada de piedra tártara domina solemnemente el patio de la iglesia, donde se yergue un imponente campanario de 30 metros de altura, decorado con ventanas ojivales simples, dobles y triples. Al suroeste, el edificio destaca sobre la plaza Innocenzo III gracias a la Loggia delle Benedizioni, el exterior de la capilla Caetani y la escalinata escénica que se curva detrás de los ábsides[52].

Campanario de la catedral

En el interior los elementos románicos, como la alternancia de pilares y las columnas que separan las naves, se entrecruzan con elementos arquitectónicos típicamente góticos, señal de una época de transición en la arquitectura. El suelo, maravillosa labor de estilo cosmatesco, es obra de Cosma di Jacopo, y está datado entre los años 1224-1227.

Interior de la Catedral

La Cripta de la Catedral está dedicada a san Magnus, patrono de la ciudad, y se construyó al mismo tiempo que la iglesia superior. Por su impresionante belleza es conocida como la “capilla sixtina” de la Edad Media[53].

Cripta de la catedral

La Virgen con el Niño: Reliquia de santo Tomás de Aquino

En la Capella del Salvatore, que se encuentra dentro de la museo de la cripta de la catedral, se puede venerar un precioso icono relicario que conserva las reliquias de santo Tomás de Aquino, santo Tomás Becket y san Pedro de Salerno[54].

Esta es una pintura sobre madera, realizada en 1325 por Lello de Urbe, que representa a la Virgen con el Niño. De rodillas, está representado, Reinaldo de Anagni, el presbítero que encargó la imagen.

Icono relicario

F. Maenza

El pueblo de Maenza se alza sobre la montaña a más de 360 m. de altura y posee una agraciada ubicación. Entre Maenza y Roccasecca dei Volsci se extiende el valle del río Amaseno, mientras que entre Maenza y Roccagorga se abre el camino al pie del monte Caprèa y del monte Semprevisa que conducen a Carpineto Romano, lugar de nacimiento del Papa Pecci, León XIII[55].

  1. Historia
  2. Castillo de Maenza

1.Historia

Desde finales de enero o principios de febrero de 1274, Tomás y su compañero Reginaldo de Piperno[56] se pusieron en camino hacia el concilio que Gregorio IX había convocado para el primero de mayo del mismo año en Lyon, con vistas a un acuerdo con los griegos. Tomás llevaba consigo el Contra errores graecorum, que había redactado a petición de Urbano IV.

Un poco después de Teano, absorto en sus pensamientos, no se dio cuenta de que había un árbol caído cruzado en medio del camino, contra el cual golpeó, hiriéndose la cabeza con una rama. Su compañero se precipitó a ayudarlo, pero él aseguraba que apenas estaba herido[57].

Luego de algunos días de viaje llegaron al castillo de Maenza, donde vivía Francesca, sobrina de Tomás. Las fuerzas y la salud de nuestro santo se habían debilitado notablemente; y estando allí se enfermó, perdió completamente el apetito y lo confiaron a los cuidados del médico Juan de Guido, de Piperno. Habiendo preguntado a Tomás qué le gustaría comer, para ver si lograba devolverle el apetito, obtuvo una respuesta desconcertante: arenques frescos, plato que nuestro doctor probablemente había gustado cuando vivía en París. El médico lamentó mucho no poder satisfacer la solicitud del enfermo, ya que ese tipo de pescado no se encontraba por ningún lado en la zona. Sin embargo, cuando salió a la plaza del castillo se topó con un hombre que venía de Terracina y llevaba un cargamento de sardinas recién pescadas. Le pidió que apoyase la carga en la tierra para comprobar que no hubiese otros pescados mezclados entre las sardinas; y con sorpresa encontró una canasta llena de arenques frescos. El médico no salía de su asombro, porque ese tipo de pescado nunca se había visto en aquellos lugares, además de que el hombre que transportaba el pescado seguía asegurando que había comprado solo sardinas. Según Tocco, santo Tomás decidió no comerlas. Por el contrario, otro testigo ocular, Pietro di Monte San Giovanni asegura que los comió[58].

El Aquinate santificó con su presencia el castillo de Maenza, donde se conserva hasta hoy la habitación en donde se alojó. Se dice que permaneció allí durante 40 días. Sin embargo, en el proceso de canonización se dice que fueron solo unos pocos días[59].

El 22 de octubre de 2011 la comunidad de Maenza inauguró un monumento dedicado a santo Tomás de Aquino. La obra, del artista Gabriele Jagnocco, se encuentra en la plaza del Duomo, a los pies del castillo. Consiste en una escultura realizada en travertinos y bronce, donde aparecen representados el santo y todos los símbolos que atestiguan su presencia en el lugar: el milagro de los arenques, la rama de olivo, los grandes libros y el contorno del castillo.

Monumento dedicado a santo Tomás

2.Castillo de Maenza

  • GOOGLEMAPS: Castillo de Maenza
  • Dirección: Piazza del Duomo, 04010 Maenza LT.
  • Horario: domingos, de 10:30 a 12:00 y de 15:00 a 17:30; sábados 16:00 a 18:30 h
  • https://www.beniculturali.it/luogo/museo-del-paesaggio-di-maenza

Vista panorámica del Castillo de Maenza

El castillo se levanta en el centro de la villa medieval, dominando la ciudad con su imponente figura cuadrilátera, su alta mole en forma de espolón, y sus torres rectangulares: tres torres que sobresalen en las esquinas y una en el centro de la fachada sur[60].

Interior del Castillo

A lo largo de los siglos, el edificio fue ampliado y sufrió diversas transformaciones, pasando de residencia defensiva a corte renacentista, como demuestran los escudos de armas y las inscripciones talladas y pintadas (siglos XIV-XVII) relativas a los distintos señores del feudo. La parte superior del castillo está dotada de torres cuadrangulares y semicilíndricas edificados entre los siglos XII y XVI, y presenta además almenas cuadradas. Toda esta estructura se conserva en perfecto estado.

Ingreso del Castillo

El interior fue embellecido en 1640 con frescos jaspeados, grutescos, paisajísticos y heráldicos, decoraciones que se añadieron a las inscripciones góticas y renacentistas preexistentes, a los escudos de armas de las familias De Cabanni y Caetani y a las chimeneas, de las cuales sobre sale la del Piano Nobile, del siglo XVI-XVII. La sala conocida como la stanza di san Tommaso, donde se hospedaba cuando visitaba a su sobrina, alberga frescos de Vincenzo Fedele di Montefortino[61]. En la actualidad, el castillo alberga el Cívico Museo del Paisaje y Eventos Culturales.

G. Fossanova

En el corazón de la llanura pontina, en el municipio de Priverno, se encuentra el Borgo de Fossanova. Este nació y se desarrolló alrededor de una abadía gótico-cisterciense, construida en el año 1200, y ubicada a 5 km del centro urbano de Priverno y 106 km al sudeste de Roma.

  1. Historia
  2. Abadía de Fossanova
  3. La iglesia abacial
  4. El complejo abacial
  5. La celda donde murió el Angélico

1. Historia

El abad de ese entonces, Teobaldo de Ceccano, habiendo tenido noticia del paso de santo Tomás por Maenza, visitó al santo junto con otros hermanos y le rogaron insistentemente que se hospedase en la abadía. El santo, habiendo ya recuperado un poco de fuerzas físicas, aceptó la invitación y decidió trasladarse desde el hogar de su sobrina a la abadía de Fossanova. Se cuenta que su discernimiento fue el siguiente: Si el Señor debe venir a visitarme, es mejor que me encuentre en una casa de religiosos que en una de seglares.

Este viaje de 16 kilómetros, el último de su vida, lo realizó sobre una montura, lo cual demuestra su debilidad y la gravedad de su estado, ya que a los dominicos no les estaba permitido montar para desplazarse[62].

Se calcula que santo Tomás llegó a la abadía en el mes de febrero. En atención a la precaria salud del santo doctor, le fue preparada una habitación que se encontraba cercana a la enfermería. Fue asistido con gran atención y reverencia de parte de los monjes, que en aquel momento eran más de 100[63]. Algunos de ellos le pidieron que les explicase el cántico de Salomón según el sentido y el espíritu de san Bernardo, pero él les respondió diciendo: “dadme el espíritu de Bernardo y yo os daré una exposición exhalando el espíritu de Bernardo”. Ellos insistieron, rogando que lo hiciera, al menos, según su propia mente. Entonces santo Tomás accedió a los ruegos, y les habló según lo que sinceramente su ánimo pío le sugería[64].

La salud de santo Tomás empeoró visiblemente. En aquellos días dio ejemplo de admirable paciencia y edificó a los monjes con su comportamiento. Estos, por su parte, le sirvieron con extraordinaria caridad, movidos por la gran veneración que le tenían. Competían por llevar a cuestas la leña del bosque o lo que le fuera necesario. Los monjes recordarán luego de su muerte no solo la suprema paciencia de Tomás, sino también su mansedumbre, humildad e inalterable bondad[65].

El 5 de marzo recibe el viático, como era de costumbre. Según los testigos oculares pronunció en aquel momento algunas palabras que demuestran el juicio que el moribundo tenía de su obra:

yo te recibo, premio de la redención de mi alma, yo te recibo viático de mi peregrinaje, por el amor de quienes estudiado, envejecido, sufrido; te he predicado, te he enseñado; nunca jamás he dicho nada en contra de ti, y si lo he hecho ha sido por ignorancia y no me obstino en mi error; si he enseñado mal con relación a los sacramentos otra cosa, me someto al juicio de la santa Iglesia romana, en obediencia a la cual dejo ahora esta vida[66].

Muerte de Santo Tomás

Santo Tomás murió la mañana del 7 de marzo de 1274, convirtiéndose en una luz espléndida que ilumina el mundo con su doctrina, y transformando Fossanova en su candelabro. El bendito doctor luchó con tanta valentía y venció de modo triunfal, que puede decir como San Pablo: “he peleado la buena batalla, he terminado la carrera, he mantenido la fe. Por lo demás la corona de la justicia ya me está reservada”[67]. Una corona que realmente mereció por el estudio de la doctrina.

Los restos mortales de santo Tomás

El cuerpo de santo Tomás fue enterrado frente al altar mayor de la iglesia de Fossanova. Los monjes cistercienses, temiendo que los dominicos quisieran recuperar los restos del santo para su Orden, buscaron distintos modos de ocultar las reliquias.

En octubre de 1274, pocos meses después de su muerte, se realizó el primer traslado de su cuerpo. Lo sacaron de la tumba de la iglesia y lo escondieron en la capilla de Santo Stefano, que estaba ubicada en el interior del mismo monasterio. Al abrir la tumba, tanto el cuerpo y como su la ropa fueron encontrados intactos.

Pero el Angélico se apareció en sueños al abad de Fossanova, quejándose de que sus hermanos no podían rezar ante su tumba, por lo cual el abad hizo que llevaran nuevamente el cuerpo a la iglesia. Esta vez colocaron el cuerpo dentro de un sarcófago de mármol, en el lado izquierdo del presbiterio.

Pasados catorce años de su muerte, Teodora, hermana de santo Tomás, pidió al abad de Fossanova, Pietro de Monte san Giovanni, la mano derecha de su hermano como reliquia. También en estas circunstancias, el cuerpo y la ropa del Santo fueron encontrados incorruptos, excepto la punta de la nariz, la cual estaba levemente dañada.

Tras esta segunda apertura del sepulcro se decidió separar los huesos de la carne, hirviendo el cuerpo en vino. Esta práctica no era extraña a las costumbres de la época.

Décadas más tarde a causa de ciertos conflictos, sus restos fueron trasladados nuevamente. Esto ocurrió en 1349 cuando Onorato Caetani, conde de Fondi, se encontraba en guerra contra el Señor de Piperno. Onorado, al no poseer los recursos necesarios para solventar su campaña, pensó en robar a los monjes de Fossanova las reliquias de santo Tomás para venderlas al rey de Sicilia y así obtener los fondos necesarios para la guerra. Los monjes, incapaces de defender las reliquias, las entregaron al conde. Sin embargo, Onorato renunció al proyecto de venderlas porque se había aliado con la familia de santo Tomás, y decidió guardarlas en la capilla de su castillo.

Tiempo después los monjes pidieron la restitución de las reliquias, y fue por un singular milagro del santo concedido a la familia que el conde decidió devolver los restos al monasterio de Fossanova. Allí permanecieron escondidos en el campanario de la iglesia. Apenas pasado un tiempo, sin embargo, el conde volvió a robar las reliquias valido de su gran astucia.

Las reliquias se veneraron en Fondi hasta 1368 año en que fueron trasladadas a Toulouse, junto con la cabeza, que se conservaba en Priverno [68]. (ver más adelante, en el apartado de Priverno, acerca de este controvertido asunto)

2. Abadía de Fossanova

Fossanova

La construcción de esta iglesia comenzó a finales del siglo XII y se finalizó entre los años 1217 y 1218. Los monjes cistercienses que la construyeron la consagraron con el nombre de santa María[69].

El siglo XIII parece haber sido el más esplendoroso en cuanto a la vida monástica de esta abadía. Pero a partir del siglo XV, con el establecimiento de la Encomienda (la abadía vino entregada a un cardenal en calidad de comendatario) comienza una lenta decadencia, que concluirá con el advenimiento de la República Italiana a fines del XVIII[70]. Los monjes se vieron obligados a huir al castillo de San Sebastiano, en Isola di Sora, y ocupantes ilegales robaron todos sus bienes.

Recién en el año 1823 el clero, el Capítulo de la Catedral y el municipio de Piperno apelaron por primera vez al Papa León XII, reclamando el regreso del antiguo monasterio a la Iglesia. La devolución del complejo abacial quedó acordada el 14 de octubre de 1826. Para habitar la abadía León XII ordenó el traslado a Fossanova de los cartujos de San Bartolomeo de Trisulti: fueron nueve los monjes que llegaron para ocupar el monasterio.

Con la incorporación de los Estados Pontificios al Reino de Italia en septiembre de 1870, todas las propiedades de la iglesia fueron nacionalizadas, incluida Fossanova en el año 1873. Debido a esto los cartujos se vieron obligados a abandonar el monasterio.

Entre 1926 y 1933 vivieron en el antiguo monasterio cisterciense 3 monjes de Don Guanella, y en 1936, la abadía fue confiada a los Hermanos Menores Conventuales.

Durante la Segunda Guerra Mundial, las tropas alemanas ocuparon la abadía desde noviembre de 1943 hasta el 24 de mayo de 1944[71]. Terminada la guerra la abadía quedó en manos de la Superintendencia de Bienes culturales del Lazio. Sin embargo, la asistencia pastoral no fue suspendida, y la llevaron a cabo los Hermanos Menores Conventuales; hasta que en septiembre de 2017 pasó a manos de los misioneros del Instituto del Verbo Encarnado.

Vista panorámica de la abadía de Fossanova

3. La iglesia abacial

interior de la iglesia abacial

La iglesia es de estilo cisterciense “borgoñón francés”, posee planta en forma de cruz latina, su fachada se encuentra adornada por un hermoso rosetón, mientras que el interior está dividido en tres naves separadas por columnas.

En el cruce de los brazos de la cruz latina se observa un cimborrio de origen románico, elemento arquitectónico que se utiliza en la arquitectura cisterciense para albergar el campanario.

En cuanto a la decoración, la iglesia posee solo dos frescos originales: el de la Puerta de los Muertos, que representa una alegoría de la muerte y el de santo Tomás, ubicado en el lado izquierdo del presbiterio, en el lugar donde estuvo su sepultura.

El Aquinate aparece sosteniendo una custodia. A sus pies se lee la inscripción:

HIC REQUIEVIT – CORPUS DIVI-TH – OME AQUINAT

– IS A.D. 1(2)74:

Aquí descansó el cuerpo de santo Tomás de Aquino, año del Señor de 1(2)74.

fresco del santo que se encuentra en el presbiterio

inscripción

En la capilla dedicada a santo Stefano y a santo Tomás, que se encuentra en la navata izquierda de la iglesia se halla el sarcófago albergó los restos de santo Tomás[72]. Tras la supresión de la Abadía, el sarcófago fue trasladados a Priverno junto con otros objetos. En 1827, lo devolvieron a la abadía, y desde el 23 de julio de 2023, tras su restauración, se lo venera en el lugar mencionado.

Sarcófago

4. El complejo abacial

Según la costumbre cisterciense, el complejo abacial se divide en dos alas: la llamada “ala de los conversos”, ubicada en el lado oeste, y el “ala de los monjes” ubicada en el lado este. En esta última se halla el claustro y otras salas de uso particular.

El ala de los conversos consta de un edificio de dos plantas. Las amplias puertas de la planta baja indican que era utilizada como almacén. Antiguamente esta ala poseyó una capilla en la parte colindante con la iglesia[73], donde estuvo escondido el cuerpo de santo Tomás durante un tiempo[74]. Hoy en día existe una nueva capilla dedicada a santo Stefano.

claustro

El claustro posee tres alas románicas, con los corredores cubiertos por bóvedas de cañón, y un ala gótica de fecha posterior, que destaca por su bóveda de crucería y la talla de las columnas.

En una de las esquinas del claustro, junto a la puerta de acceso a la iglesia llamada “diurna”, se encuentra una piedra extraída del pavimento marcada con las huellas de la mula de santo Tomás. Se narra que la sobrina de santo Tomás, la condesa Francesca de Ceccano, se dirigió a la Abadía para participar en el funeral de su tío. Una vez allí, debió esperar que el cuerpo fuera llevado a la entrada del monasterio, porque estaba prohibido el ingreso a las mujeres. Cuando llegó el ataúd, ella y las dos señoras que la habían acompañado comenzaron a llorar y gemir tan fuertemente que la mula, la misma que unos días antes había transportado a Tomás hacia Fossanova, rompió la cuerda que la ataba, y escapando del establo, llegó a la puerta de entrada de la Abadía sin que nadie la guiara. Allí murió recostada junto al ataúd, no por enfermedad alguna, sino a causa de la pérdida de su dueño[75].

Piedra del pavimento marcada con las huellas de la mula que llevó a santo Tomás

Saliendo del claustro hacia el este, a través de un pasaje con bóveda de cañón que atraviesa el dormitorio de los monjes, se puede acceder a un jardín, donde encontramos el llamado “pequeño claustro” o chiostrino. Del lado este del chiostrino se encuentra la enfermería, ubicada en forma paralela al dormitorio mencionado. Hubo en otra época una capilla contigua a la enfermería, dedicada a santa Pudenziana. Allí, en el lugar que antaño perteneciera al presbiterio, descansan los restos mortales del Cardenal Velasio De Paolis.

Tumba del Cardenal Velasio De Paolis

En la planta superior a esta antigua capilla se encuentra la habitación donde falleció santo Tomás.

5. La celda donde murió el Angélico

Interior de la capilla donde murió santo Tomás

El cardenal comendatario Francesco Barberini realizó una importante renovación en la celda donde murió el santo, para lo cual hizo unir dicha celda con la habitación contigua y erigió un altar, adornado con un altorrelieve del escultor Antonio Giorgetti[76], en el que se representa a santo Tomás recostado y enfermo, mientras explica el Cantar de los cantares a los monjes que le rodean[77].

En la pared izquierda de la capilla, en una larga inscripción mural de difícil lectura, se encuentra el siguiente texto que data del siglo XVI:

Cuando santo Tomás, se encontraba en el cenobio cisterciense de Fossanova, cerca del río Amaseno, en Campaña, reponiéndose luego de haberse debilitado la fuerza de su estómago por los estudios continuos, los monjes presentes junto a su cama le pidieron que les explicase el cántico de Salomón según el sentido y el espíritu de san Bernardo, aunque de una manera más breve; pero él les refutó diciendo: “dadme el espíritu de Bernardo y yo os daré una exposición exhalando el espíritu de Bernardo”.

Pero ellos, insistiendo, le pidieron que al menos les diera una breve explicación de los cánticos (Cantar de los cantares), según su propia mente. Dejando venir algunos monjes para que lo escuchasen y escribiesen las palabras que salían de su boca, comenzó la segunda exposición del cántico, distinta en estilo y erudición de la primera exposición del mismo libro, según requería el tiempo, según las oraciones de los monjes y según la circunstancia de su enfermedad, escribiendo no lo que el arte, sino aquello que su pío ánimo acercándose a la futura inmortalidad, le sugería…

Mientras explicaba, cuando hubo llegado hasta el sexto capítulo del libro, y pronunciado con los ojos dirigidos al cielo, enardecido el espíritu y lleno de alegría, aquellas palabras del mismo capítulo:

“ven…entremos en el huerto” …

inmediatamente exhaló su alma (la cual) salió de su cuerpo mortal hacia el jardín de la felicidad eterna … el año 49 (latín 44) de su edad y 1274 del nacimiento de Cristo…

Altorrelieve del escultor Antonio Giorgetti

También pueden verse, a ambos lados de la abertura de ingreso al altar, las siguientes inscripciones:

Inscripción del mural derecho

OCCIDIT HIC THOMAS LUX UT FORET AMPLIOR ORBI

ET CANDELABRU SIC NOVA FOSSA FORET

Aquí murió santo Tomás, para convertirse en la luz más espléndida del mundo y así Fossanova fuese su candelabro.

Inscripción del mural izquierdo

EDITUS ARDETI LOCUS ET NON FOSSA LUCERNA

HAC IGITUR FOSSAM QUIS NEGET ESSE NOVAM?

Arde este elevado lugar; y no es una lámpara oculta

¿quién negará, entonces, que esta fosa es nueva?

H. Priverno

La ciudad de Priverno, que desde la Edad Media hasta 1927 era llamada Piperno, se encuentra ubicado en el centro del valle del Amaseno, en una zona de modestas alturas que forma parte de los Montes Seiani. Nativo de Priverno fue Fra. Reginaldo, el querido amigo y compañero de santo Tomás[78].

  1. Historia
  2. Concatedral de santa María Annunziata

1. Historia

Dos Iglesias particulares se disputan el privilegio de poseer el cráneo de santo Tomás, la de Toulouse y la de Priverno: en ambos se venera una cabeza que la tradición atribuye a santo Tomás. No se sabe a ciencia cierta desde cuando se venera la cabeza de santo Tomás en la iglesia de san Benito de Priverno, aunque se afirma que la cabeza llegó allí por petición del municipio de Piperno. La preciada urna que contenía la cabeza estaba cerrada con cinco llaves: cuatro de las cuales las eran custodiadas por los cuatro Oficiales de las Puertas de Piperno y la quinta, por el abad de Fossanova. La iglesia de san Benito dependía, en aquel momento, de la abadía y fue también residencia del abad[79].

Ciudad de Priverno

La cabeza que se venera en Priverno fue encontrada en Fossanova en 1585, aunque su autenticidad es enérgicamente cuestionada por los historiadores franceses.

Reliquia de Santo Tomás

2. Concatedral de santa María Annunziata

  • GOOGLEMAPS: Concatedral de santa María Annunziata
  • Dirección: Via S. Giovanni, XXIII, 04015 Priverno LT.
  • Horario: de lunes a domingo de 8.00 h a 18.00 h.
  • Email: pm-laz@beniculturali.it. Polo Museale del Lazio propiedad del MiBAC.
  • Teléfono (WhatsApp): +39773939061.
  • Obs.: A pesar de los horarios anunciados la Catedral no está siempre abierta. Por tanto, se recomienda llamar antes de ir.

Fachada de la Concatedral de santa María Annunziata

Erigida en el centro de Priverno, está dedicada a Santa Maria Annunziata, se remonta a finales del siglo X o principios del siglo XI y fue consagrada a fines del siglo XII[80].

La iglesia tiene tres naves, según los cánones de la arquitectura románica, de las cuales la central remata en un ábside semicircular. En el siglo XVI se agregaron diversas capillas en las naves laterales[81].

Las obras que se destacan de la nave central son:

– La pintura de la Anunciación, en el ábside, obra de Ferninado de Ludovisi, del año 1756[82].

– La balaustrada de mármol del presbiterio, el altar mayor y los dos pilares que lo flanquean, obras de Giuseppe Perini, realizadas entre los años 1784-1795[83].

– El pulpito en madera, obra de Fortunato Baccari, del siglo XIX[84].

– El via crucis de la nave central, obra del pintor Giuseppe Camponeschi, del año 1776[85].

Interior de la Concatedral de Priverno

En la nave derecha se conserva la tabla del siglo XV de la “Madonna d’Agosto”, considerada como protectora de la ciudad de Priverno junto con santo Tomás de Aquino.

Por otro lado, la capilla más famosa es la de santa Catalina de Siena, que conserva la reliquia de cráneo de santo Tomás.

A fines del siglo XVIII el patronato de esta capilla pasó a Federico Zaccaleoni. Su hijo, Agostino, fue quien, con la autorización del Capítulo de la Catedral, restauró la capilla. También obtuvo el privilegio de conservar las reliquias más importantes de la Catedral, por lo que hizo retirar el cuadro de santa Catalina y se abrir un nicho en ese lugar, donde se conservan hasta el día de hoy las reliquias de santo Tomás[86].

Capilla con la reliquia de Santo Tomás

I. Fondi

Fondi es un importante municipio de la provincia de Latina, situada a medio camino entre Roma y Nápoles. Su aglomeración urbana está rodeada por los montes Aurunci y Ausoni y abierta al sur hacia el mar Tirreno.

  1. Historia
  2. Convento de santo Domingo y capilla de santo Tomás

1. Historia

Fossanova era conocida como el lugar del sepulcro de este nuevo santo, canonizado por el Papa Juan XXII el 18 de julio de 1323. En el 1349, las reliquias fueron sustraidas por Onorato, conde de Fondi; recuperadas por el abad de Fossanova, fueron de nuevo robadas por el mismo personaje, y trasladadas a Fondi hasta 1368.

Aquel año, el maestro general de los dominicos, Elia Raymond, con el apoyo del el Papa Urbano V, logró rescatar las reliquias del santo obteniendo de las autoridades de Fondi la arqueta de plata que contenía los restos mortales. Mientras que desde la recidencia pipernese del abad de Fossanova (Iglesia de San Benito) obtiene la urna dorada con el craneo de santo Tomás. Acompañado del abad de Fossanova y los notables de Piperno, trasladaron las reliquias a Montefiascone, donde residía Urbano V. Pasando por Viterbo y Orvieto, llegaron a  Toulouse, el 28 de enero de 1369[87].

2. Convento de santo Domingo y capilla de santo Tomás

  • GOOGLEMAPS: Convento de santo Domingo y capilla de santo Tomás
  • Dirección: Largo Luigi Fortunato, 04022 Fondi LT.
  • Horario: abierto al público de martes a domingo desde las 09:00 h hasta las 13:00 h y por las tardes desde las 16:30 h hasta las 20:30 h.
  • Teléfono (WhatsApp): +39771513644.
  • Obs.: es recomendable llamar antes de ir.

Claustro del Convento de santo Domingo

El antiguo convento se encuentra dentro del primitivo castrum urbano, cerca de la parte sur de las murallas, bordeado por la Via Appia.

Determinar la fecha de fundación del convento de los frailes predicadores y describir cronológicamente sus etapas de desarrollo es actualmente una tarea difícil, debido a la falta de fuentes documentadas[88]. Una fuerte tradición local afirma que aquí antiguamente residía una comunidad benedictina. Se sabe además que los dominicos habrían llegado luego de 1303 y antes de 1358.

Hubo una Iglesia dedicada a santo Tomás antes del siglo XVII, hoy en día en posesión del gobierno y se utiliza para eventos culturales.

La nave central de la antigua iglesia está dividida en tres espacios desiguales, ya que sufrió importantes intervenciones y reformas durante el siglo XV por mandato de Onorato II Caetani d’Aragona[89]. En el año 2004 se realizaron nuevas obras de restauración, las cuales revelaron la existencia de un ábside semicircular de notable antigüedad[90].

La Iglesia, en su primera construcción, tenía paredes de estuco de color amarillo pálido y un altar en el lado oeste rodeado por dos columnas que imitaban el mármol. La bóveda, por el contrario, estaba cubierta por una rica decoración, y fue nuevamente pintada durante el siglo XIX.

Interior de la antigua iglesia del convento de Santo Domingo

La capilla dedicada a santo Tomás

Interior de la Capilla votiva a santo Tomás

El coro de la antigua iglesia fue trasnformado  en una capilla votiva a santo Tomás a finales del siglo XVII. En el documento de Apprezzo dello Stato di Fondi, de 1690, se narra lo siguiente:

Junto a dicha iglesia está el convento con su claustro y dormitorios, con la celda de santo Tomás de Aquino, ahora reducida a capilla[91].

No hay una fecha exacta de las decoraciones pictóricas, aunque puede estimarse por los diferentes estilos[92].

Entre las pinturas destacan los frescos de: santo Tomás y santa Catalina de Siena, de estilo napolitano, de una escuela de la primera mitad del siglo XV[93]. De esto podemos deducir que los dominicos que tomaron posesión de la antigua iglesia realizaron pinturas con relación a los santos de su orden[94].

Durante la primera mitad del siglo XIII, se construyó en el lugar de la primera iglesia, la cual probablemente tenía ábside semicircular, un nuevo edificio de una sola nave, rematado en un coro cuadrado, al que se accedía por un arco ojival[95].

Dentro de la capilla se venera una imagen de santo Tomás de Aquino, de época moderna, sobre cuyo pecho se conserva una reliquia de primer grado.

Reliquia de Santo Tomás en Fondi

En este lugar se conservaron durante un breve periodo de tiempo los restos de santo Tomás, traídos desde Fossanova, antes de que el Papa Urbano V ordenara su traslado a Toulouse (Francia). En una placa, que se encuentra fuera de la capilla donde yacía el cuerpo del santo, se lee la siguiente inscripción:

Inscripción que se encuentra fuera de la capilla

HAC IN AEDE CORPUS DICI THOMAE AQUINATIS
EX MONASTERIO FOSSAE NOVAE ALIQUANDIU
QUIEVIT ET POSTEA URBANO V SUMMO PONTIFICE
REGNANTE THOLOSAM FUIT TRANSLATUM.

En este templo se dice que descansó, por algún tiempo, el cuerpo de Tomás de Aquino, (traído) del monasterio de Fossanova, y luego fue trasladado a Tolosa bajo el reinado del Sumo Pontífice Urbano V.

J. Roma

  1. Historia
  2. Basílica de santa Sabina.
  3. El convento de santa Sabina.
  4. Basílica de santa Maria sopra Minerva.

1. Historia

En 1265, el capítulo provincial de los dominicos celebrado en Anagni, determinó que santo Tomás fuese destinado a Roma para fundar un studium conventual en la iglesia de santa Sabina, para la formación de los hermanos de los diversos conventos de la provincia romana[96].

Durante este período, Tomás intentará retomar para sus estudiantes el comentario de las Sentencias ya enseñado en París. Como no le pareció suficiente, dejó de lado este intento a finales del primer año, para realizar un proyecto diferente: la redacción de la Suma Teológica. Con esto Tomás intentaba contribuir a la ya larga y acentuada tradición de los manualistas de la Orden, pero también quería colmar la laguna más importante que existía en aquel período, dando a la Teología moral la base dogmática que hacía falta[97]. La Suma Teológica es todavía hoy la obra de Tomás más utilizada, y sin duda la más conocida.

Cerca de Roma, en la zona de los Castelli Romani, hay una localidad llamada Molara por donde santo Tomás pasó dos veces. En este lugar se hallaba el castillo del cardenal Riccardo degli Annibaldi († 1276), personaje que tenía especial cariño y trato familiar con el santo. En este castillo sucedieron dos episodios significativos, ambos relatados por Guillermo de Tocco: la conversión de dos judíos después de las conversaciones tenidas con Tomás y la curación de fray Reginaldo, realizada por nuestro santo con la imposición las reliquias de santa Inés, que él mismo llevaba consigo por devoción[98].

El castillo, casi en ruinas, quedó deshabilitado en el siglo XV, y fue totalmente destruido en el siglo XVII. Hoy en día, allí se encuentra la grandiosa Villa Mondragone, la cual no es posible visitar en la actualidad.

Vista panorámica de la Villa Mondragone

2. Basílica de santa Sabina

Interior de la Basílica de santa Sabina

Santa Sabina es una de las basílicas menores de Roma. Está situada en la colina del Aventino. Fue construida entre los años 422 y 432, sobre un templo dedicado a la diosa Juno.El sacerdote Pedro de Illiria llevo a cabo la construcción de la Iglesia en la propiedad de la matrona romana Sabina.

El edificio posee una planta rectangular de gran longitud, dividida en tres naves separadas por columnas. Debajo del altar se encuentran los restos de santa Sabina. La puerta de entrada, de madera, fue fabricada en el siglo V. El coro es imponente y hasta el día de hoy los frailes dominicos celebran allí los oficios litúrgicos.

La Basílica santa Sabina con sus terrenos aledaños fue donada por el Papa Honorio III a santo Domingo de Guzmán en 1221[99].

3. El convento de santa Sabina

  • Horario: acordar con el contacto.
  • Contacto: Fr. Philipp Johannes Wagner O.P. (para visitas guiadas).
  • Email: PJUJOP@gmx.net / rettore.basilica@curia.op.org
  • Teléfono (WhatsApp): +393388137882.

Este convento es la residencia de la Curia General de la Orden de Predicadores y ha permanecido casi inalterado desde los primeros días de la Orden. El aposento de santo Domingo fue transformado en un oratorio.

Interior del aposento de Santo Domingo

Aún se conservan el refectorio y la sala capitular originales, ambos construidos en tiempos de Santo Tomás.

Sala Capitular

4. Basílica de santa Maria sopra Minerva

Basílica de santa Maria sopra Minerva

En el área actualmente ocupada por la Basílica de santa Maria sopra Minerva y el convento dominico, existían antiguamente tres templos: el Minervium, dedicado a Minerva Calcídica, el Iséum, dedicado a Isis, y el Serapéum, dedicado a Serápis.

Según documentos del siglo VIII, se encontraba aquí una pequeña iglesia que el Papa Zacarías (741-752) había concedido a monjas basilianas. En 1255 la Iglesia pasó a pertenecer a la Orden de los Predicadores.

Si bien, a lo largo de los siglos la basílica recibió distintas transformaciones y restauraciones, su estilo es predominantemente gótico. Aquí descansan los cuerpos de santa Catalina de Siena y del pintor fray Giovanni da Fiesole, más conocido como Fra Angélico[100].

En esta iglesia el cardenal Oliviero Carafa, protector de la Orden de los Dominicos, erigió una capilla, a la derecha del presviterio, en honor a santo Tomás en 1486. Actualmente conocida como la capilla Carafa, aquí se encuentra la reliquia del brazo derecho de santo Tomás.

El arco triunfal de ingreso de la capilla lleva la siguiente inscripción:

DIVAE MARIAE VIRGINI ANNUNTIATAE ET DIVO THOMAE AQUINATI SACRUM:

Capilla de la santísima Virgen María de la Anunciación y de santo Tomás de Aquino.

En las paredes del fondo y de la derecha están los célebres frescos realizados por Filippino Lippi. El panel sobre el altar representa a la Virgen acompañada por un ángel y a sus pies se encuentran el cardenal Carafa y santo Tomás.

Panel sobre el altar

En la pared derecha de la capilla, se puede observar a santo Tomás en oración.

Mural derecho de la capilla

Debajo se encuentra el magnífico fresco conocido con el nombre de El triunfo de santo Tomás sobre la herejía. El santo aparece sentado en una cátedra, con un libro en la mano izquierda, miestras que con la mano derecha indica el error, personificado por un hereje vencido, tumabado en el suelo.

Junto al santo se observa cuatro figuras femeninas que simbolizan la gramática, la retórica, la dialéctica y la filosofía. En primer plano están los discípulos de santo Tomás, a la derecha y los herejes, a la izquierda[101].

Fresco del El triunfo de santo Tomás sobre la herejía

Historia de la reliquia del brazo de santo Tomás

En plena revolución francesa (1789-1799) un fraile salvó de la destrucción el objeto más preciado del convento dominico de St. Jacques, en París: el brazo izquierdo de santo Tomás de Aquino. Para poner a salvo la reliquia, el fraile la envió al príncipe Ferdinando I, duque de Parma-Piacenza y Guastalla, gran protector de la orden dominicana. Cuando murió el duque, su enorme colección de reliquias fue heredada por su hija Carlotta. Ella se convirtió en monja dominica y llevó como dote al convento de santo Domingo y san Sixto de Roma numerosas reliquias, entre ellas la de santo Tomás.

Reliquia del brazo de santo Tomás

Con motivo del sexto centenario de la muerte de Santo Tomás, en 1874, la reliquia fue trasladada a la Basílica de santa María sopra Minerva.

K. Nápoles

La ciudad de Nápoles es la capital de la región de Campania y de la provincia homónima. Está situada a medio camino entre el Vesubio y otra área volcánica, los Campos Flégreos.

  1. Historia
  2. Basílica de san Domenico Maggiore
  3. Complejo conventual de san Domenico
  4. Catedral de Nápoles

1. Historia

Cuando tenía alrededor de 15 años, Santo Tomás se inscribió en el Studium Generale de Nápoles, era el otoño de 1239, para abordar el estudio de las artes y de la filosofía, doctrinas obligadas antes de estudiar teología[102]. Fue allí también donde conoció los escritos de Aristóteles.

El Studium Generale era una universidad medieval que recibía alumnos provenientes de distintas partes de Europa, a los cuales se les concedía, al acabar sus estudios, el derecho de enseñar.

Santo Tomás, conoció la Orden de Predicadores en esta ciudad, y aquí pidió su ingreso. Los dominicos se habían establecido en Nápoles en 1231, en el convento benedictino san Michele a Morfisa, hoy Iglesia de san Domenico Maggiore. Fue en esta iglesia donde, en abril de 1244, santo Tomás recibió el santo hábito[103].

Dos veces volvió nuestro santo a Nápoles, en 1259, época en la que se dedicó a trabajar en la Summa contra Gentiles hasta que fue destinado a Orvieto en 1261[104]; y luego en el 1272, para fundar un Studium Generale. Durante este período trabajó en la tercera parte de la Summa Theologiae[105].

Durante la cuaresma de 1273 el Angélico predicó en la iglesia ahora llamada Basílica de san Domenico Maggiore y las prédicas versaron sobre el doble presepto de la caridad y sobre la Salutación angélica. En sus sermones no utilizaba el latín universitario, sino más bien la lengua vernácula napolitana que comprendía el pueblo.

El 6 de diciembre de 1273, mientras celebraba Misa en la capilla de San Nicolás, Tomás sufrió una sorprendente transformación. En aquel tiempo, estaba redactando la tercera parte de la Summa; el tratado de la penitencia. Después de esta Misa, no escribió ni dictó nada más, e incluso se desprendió de su material de trabajo.

Reginaldo de Piperno, su secretario, sin entender por qué abandonaba su obra, le preguntaba desconcertado el motivo, a lo que santo Tomás respondió: Ya no puedo, todo lo que he escrito me parece paja después de lo que he visto[106].

Visión del 6 de diciembre de 1273

2. Basílica de san Domenico Maggiore

  • GOOGLEMAPS:Basílica de san Domenico Maggiore
  • Dirección: Vico San Domenico Maggiore, 80134 Napoli NA.
  • Horario: todos los días desde las 10:00 h hasta las 19:00 h.
  • Web: https://shop.visitaresandomenicomaggiore.it/it/biglietti.
  • Obs.: no es posible llegar hasta la basílica en coche, conviene aparcar a las afueras del centro histórico y llegar allí en transporte público.
  • El Museo Doma ofrece una visita guiada. El pago se realiza en la sacristía y se puede reservar online en el sitio web. El recorrido completo incluye: sacristía -sala del tesoro -celda de santo Tomás de Aquino -cripta del Carafa di Roccella.

Basílica de san Domenico Maggiore

La actual basílica se levanta sobre el terreno de la antigua iglesia san Michele a Morfisa. Tanto el convento como la iglesia fueron donados a los dominicos por los benedictinos.

En 1283 Carlos II de Anjou, príncipe de Salerno, construyó en ese lugar una iglesia gótica de tres naves sobre la base de una antigua iglesia románica. La basílica fue erigida en sentido opuesto a la iglesia preexistente, es decir, con el ábside hacia la plaza. En ella se encuentran multitud de obras de arte y numerosos sepulcros de personajes ilustres (nobles napolitanos, dominicos y 45 sepulcros de la nobleza aragonesa). En el centro de la basílica se puede ver el escudo de los dominicos, y en las cuatro esquinas, los escudos de armas de la Casa de Aragón y de la Corona española.

La puerta de madera y el portal ojival de mármol son los únicos vestigios de la fachada primitiva. El brazo derecho del crucero conserva vestigios románicos de la antigua basílica.

Bajo el altar, en una urna de bronce, se encuentran los huesos del Beato Raimondo da Capua, confesor de santa Catalina de Siena y XXIII Maestro General de los Dominicos, fallecido en Núremberg, Baviera, el 5 de octubre de 1399.

Por encima del altar se observan dos cuadros de Michele da Napoli: a la izquierda, santo Domingo disputando con los herejes; a la derecha, santo Tomás entre los doctores. La basílica tiene 28 capillas laterales, entre las que destaca el Cappellone del Crocifisso (o Carafa).

El espacio que ocupa esta capilla pertenecía originalmente a la capilla de san Nicolás de la antigua iglesia de san Michele a Morfisa. Desde entonces ha siempre albergado la tabla del Crucifijo del siglo XIII, que, según la tradición, habló a santo Tomás de Aquino diciendo las siguientes palabras: Tomás, has escrito bien de mí. ¿Qué recompensa quieres?, a lo que el santo respondió: Nada más que a Ti, Señor. Debajo del altar se puede ver, representado en mármol, este episodio de la vida de santo Tomás.

Tabla del Crucifijo que, según la tradición, habló a santo Tomás de Aquino

Este famoso crucifijo está resguardado por un retablo, en cuya parte superior aparecen ángeles sosteniendo el escudo de los dominicos y una estatua de yeso de santo Tomás. A los lados del altar hay dos imágenes de san Vicente y santo Tomás, talladas en madera, que pertenecieron al antiguo coro de madera de la iglesia.

Capilla de san Nicolás

3. Complejo conventual de san Domenico

  • GOOGLEMAPS: Complejo conventual de san Domenico
  • Obs.: el municipio de Nápoles tiene bajo su dirección los siguientes lugares del convento: el gran refectorio, el pequeño refectorio, la biblioteca, y la sala capitular. La entrada es gratuita y los lugares son alquilados para eventos.
  • Se aconseja realizar primero la visita guiada completa, que ofrece el Museo Doma, para luego visitar los lugares restantes que se encuentran bajo la dirección del municipio.

El refectorio principal se erigió en el lugar de la antigua enfermería del convento dominico. Las obras fueron realizadas por fray Tommaso Ruffo, prior de san Domenico desde 1668 hasta 1672. Sobre la entrada del refectorio se encuentra una pintura mural de santo Tomás orando ante el Crucifijo, realizada por Antonio Rossi d’Aversa en 1727.

Refectorio principal

El pequeño refectorio, construido en 1669 por el mismo Tommaso Ruffo, se encuentra junto al gran refectorio y era utilizado por los frailes enfermos. Se puede ver allí un gran lienzo que representa a santo Domingo comiendo en la mesa con los frailes, mientras los ángeles los sirven.

Pequeño Refectorio

En la Sala Capitular, en la pared del fondo, se pueden observar las escenas de la Pasión de Cristo y los ángeles que llevan consigo los símbolos del martirio de Cristo. Estas pinturas fueron realizadas por Michele Ragolia en 1678.

Sala Capitular

La visita termina en el Claustro de santo Tomás, que incluye su celda y el amplio corredor anterior, ambos restaurados en 1685. El corredor conserva 25 pinturas murales, realizados por Domenico Viola en el siglo XVII, que representan escenas de la vida del santo. La celda que ocupó santo Tomás por más de un año durante el último período de su vida (1272-1274) se reconoce fácilmente gracias a los mármoles que adornan la puerta; sobre cuyo dintel se yergue un busto del Aquinate, obra de Matteo Bottiglieri (1720). La disposición actual del lugar estuvo a cargo de Muzio Nauclerio (1747).

Corredor Interior

La celda protege en su interior un relicario con el húmero izquierdo del santo, al que le falta la parte de la articulación del codo, preservada en una estatua de plata en la catedral de Nápoles[107].

Reliquia del húmero izquierdo del Santo

Junto a la ventana hallamos un cuadro con media página de un manuscrito autógrafo de santo Tomás (el resto se encuentra en la Biblioteca Apostólica Vaticana). Se trata de un fragmento del Comentario al tercer libro de las Sentencias de Pedro Lombardo. En la pared se puede observar también el facsímil de la bula con la que Pío V lo proclamó Doctor de la Iglesia en 1567, bula firmada, entre otros, por san Carlos Borromeo.

Media página de un manuscrito autógrafo de santo Tomás

Atravesando el patio, de frente a la fachada de la basílica, hacia la derecha, se conserva también la sala donde santo Tomás dictó clases de Teología, como lo expresa una inscripción de mármol colocada allí para mantener viva esta memoria. En esta sala puede apreciarse una pintura del siglo XVII que presenta al santo en la tarea de enseñar[108].

Sala donde santo Tomás dictó clases de Teología

4. Catedral de Nápoles

Fachada de la Catedral de Nápoles

Según tradición literaria, la primera catedral de Nápoles fue construida por el emperador Constantino en el siglo IV, en el sitio que ocupaba un templo dedicado al dios Apolo. Al inicio estuvo dedicada al Salvador o a los Santos Apóstoles, pero más tarde quedó bajo el patronazgo de santa Restituta, virgen y mártir africana, cuyas reliquias llegaron a este lugar en el siglo V, traídas por los cristianos que escapaban de la persecución de Genserico, rey de los vándalos.

El edificio actual fue ideado por Carlos I de Anjou, rey de Sicilia, iniciado por su hijo, Carlos II, y terminado en 1313 por Roberto de Anjou, hijo de Carlos II. Fue consagrada a Nuestra Señora de la Asunción, y custodia el baptisterio más antiguo de occidente.

El interior está dividido por tres naves, separadas por ocho columnas consecutivas colocadas a cada lado. La fachada tiene 50 metros de alto.

Con el paso de los siglos ha sufrido muchas remodelaciones, uno de ellas fue la reconstrucción de la facada, a mediados del siglo XIV, después de un terremoto. De la fachada original quedan sólo algunas esculturas en la puerta central: dos leones guardando el ingreso, y la imagen de la Virgen en el tímpano. La puerta de la nave derecha sólo se abre en las tres festividades anuales dedicadas a San Genaro: el 19 de septiembre, memoria de su martirio; el sábado anterior al primer domingo de mayo, memoria del traslado de las reliquias; y el 16 de diciembre, memoria del milagro del santo en favor de la ciudad de Nápoles durante la erupción del Vesubio de 1631[109].

Capilla de San Genaro

Capilla del tesoro de san Genaro

En la nave lateral derecha se encuentra la capilla del tesoro de san Genaro.

Allí son custodiadas las reliquias de la cabeza del santo, colocadas en el interior de un busto de plata, y una ampolla con su sangre, puesta en un elaborado relicario, admirable obra maestra de orfebrería. El relicario con la sangre está cerrado con dos llaves, una perteneciente al gobierno de la ciudad, y la otra al arzobispo. Los demás restos del santo pueden venerarse en su sepulcro en la catedral.

Reliquia de San Genaro

En el siglo XVII la Real Diputación del Tesoro encargó a Cosimo Fanzago, con la autorización de la Santa Sede, el diseño de un nuevo relicario, más digno y hermoso, para la sangre. El relicario fue realizado por Alessandro Piccioni en 1635, y se conserva hasta nuestros días.

La forma y disposición del relicario permiten observar en detalle el fenómeno de la licuefacción de la sangre, que ocurre tres veces por año, en la fecha de las fiestas indicadas más arriba.

Pintura de san Genaro saliendo ileso del horno

En esta capilla se conserva también una de las pinturas más importante de José de Ribera: san Genaro saliendo ileso del horno.

El tesoro conserva, además, otros 50 bustos con sendas reliquias, pertenecientes a cada uno de los 50 patronos de la ciudad.

Entre ellos se encuentra, en octavo lugar, santo Tomás de Aquino. La reliquia que conserva el busto de santo Tomás es la articulación del húmero. El resto de esta reliquia se conserva en el claustro de santo Tomás, en el Complejo conventual de san Domenico[110].

Busto-Relicario de san Tomás

La devoción de los napolitanos a santo Tomás se difundió en el siglo XVI. Fue Claudio Milano quien obtuvo del papa Clemente VIII un decreto que designa a santo Tomás de Aquino como octavo patrono de la ciudad. El busto de san Tomás de Aquino es del año 1664, y fue realizado por Alfonso Balsamo.

L. Salerno

La provincia de Salerno limita al noroeste con la ciudad metropolitana de Nápoles, al norte con la provincia de   Avellino y al este con la provincia de Potenza in Basilicata. Es la segunda provincia más poblada de Campania.

  1. Historia
  2. Convento de san Domenico. Iglesia de santa Maria della Porta y de san Domenico
  3. Castillo de san Severino

1. Historia

A fines de 1273 santo Tomás se encontraba en Nápoles, muy enfermo, y su salud requería especiales cuidados. Por este motivo sus superiores le impusieron un período de descanso en el castillo de san Severino, residencia de invierno su hermana Teodora[111]. Junto a fray Reginaldo tomó la Via Popilia, que conducía a Salerno a través de Pompeya y Nocera. Se desviaron hasta Salerno, donde nuestro santo se detuvo en el convento de san Domenico, y luego retomaron el camino hasta Mercato san Severino.

Cuando santo Tomás llegó al castillo, la condesa Teodora, su hermana, notó que parecía haber perdido su actitud amable y tranquila. Preocupada y entristecida, preguntó a fray Reginaldo qué le sucedía a su hermano. Éste  respondió que así se encontraba desde la Fiesta de san Nicolás. Permanecieron allí un tiempo y a pesar de los cuidados de su hermana, no encontró allí el santo notable mejoría[112].

En 1288, catorce años después de la muerte de santo Tomás, su hermana Teodora pidió al entonces abad de Fossanova, Pietro di Monte San Giovanni, que le diera como reliquia la mano derecha de su hermano[113]. Esta reliquia fue custodiada con devoción en la capilla del castillo de san Severino, hasta su traslado a la iglesia de santa María della Porta y de san Domenico.

2. Convento de san Domenico. Iglesia de santa Maria della Porta y de san Domenico

Interior de la Iglesia de santa Maria della Porta y de san Domenico

El convento fue fundado en 1272. Pasó a ser un edificio público después de la represión de Napoleón, y ahora alberga el Cuartel General de la Policía Estatal, por lo cual no es posible visitarlo, aunque se puede acceder a la iglesia.

De la iglesia original no quedan rastros, el edificio actual es del siglo XVIII. Destaca en el interior de la iglesia el cuadro de san Vincente Ferrer de Casimiro Rossi, fechado en 1740.

En una capilla lateral, al ingreso, se encuentra un sarcófago imperial de estilo gótico, realizado para el entierro de la hermana de Santo Tomás.

Sarcófago realizado para el entierro de la hermana de Santo Tomás

Cerca del presbiterio, en el altar lateral izquierdo se conserva la reliquia de la mano derecha de nuestro santo. Esta capilla fue construida a expensas de la ciudad de Salerno e inaugurada el 1 de agosto de 1765. La reliquia del santo había sido donada al convento dominico de Salerno en 1317 por Teodora y fue reconocida su autenticidad en 1662.

Capilla laterar donde se conserva la reliquia de la mano derecha de Santo Tomás

3. Castillo de san Severino

  • GOOGLEMAPS: Castillo de san Severino
  • Dirección: Via Emilio Coppola, 84085 Mercato San Severino SA
  • Horario: libre.
  • Obs.: hay 40 minutos de caminata hacia la montaña. Recomendada para días de senderismo. Es accesible a pie por un sendero de dificultad media. Se recomienda un guía que conozca bien el lugar, ya que la señalización no es suficientemente clara.

El castillo de san Severino fue la segunda fortaleza más grande de Italia; estaba conformado por tres hileras de murallas, que ocupaban una superficie de más de 157.500 metros cuadrados. Fue cuna de la nobleza sanseverina más poderosa del Reino de Nápoles durante la época de las familias angevinas y aragonesas. Hoy en día solo se conservan sus ruinas.

Ruinas del Castillo Medieval de San Severino

M. Viterbo

La cuidad de Viterbo es la capital de la provincia homónima en el norte de Lazio, a 84 km de Roma, situada en las primeras laderas de los montes Cimini. La ciudad se construyó en derredor del famoso castillo de Hércules, lugar que hoy ocupan la Catedral y el palacio de los Papas.

  1. Historia
  2. Iglesia de santa Maria Nuova

1. Historia

Santo Tomás pasó por Viterbo varias veces. Aunque no hay ninguna prueba directa de permanencia prolongada, existe evidencias documentadas de dos breves estadías en esta ciudad, con ocasión de dos capítulos provinciales de la provincia romana de la Orden, reunidos allí en septiembre de 1264, y en Pentecostés de 1268[114].

2. Iglesia de santa Maria Nuova

La Iglesia de S. Maria Nuova está situada en el casco histórico y la parte más antigua de la ciudad. Fue construida antes de 1080, es de estilo románico y su interior está dividido en tres naves.

La iglesia alberga pinturas de varias épocas, como el tríptico del santo Salvador, del siglo XIII, y obras de artistas modernos como Canestrari y Mastrojanni, en bronce y terracota.

Interior de la Iglesia de santa Maria Nuova

En el exterior de la Iglesia, del lado izquierdo, se conserva un púlpito desde el cual predicó santo Tomás. Debajo del púlpito se encuentra la siguiente inscripción:

AN. D. MCCLXVI / D THOMAS AQ
año del Señor de 1264/santo Tomás de Aquino.

Según el padre A. Walz la datación es errónea por un año: la fecha correcta sería 1263[115].

Púlpito desde el cual predicó santo Tomás

Viterbo conservó de buen grado el recuerdo de la presencia del Aquinate en el convento dominico de santa Maria in Gradi. Lamentablemente el convento fue cerrado durante el período de la revolución francesa y luego arrebatado para siempre a los dominicos en 1873. Actualmente es parte de la Universidad de los estudios de la Tuscia y la iglesia se encuentra en proceso de restauración.

Iglesia de Santa Maria in Gradi

N. Orvieto

La ciudad de Orvieto se alza sobre una colina tobácea con pendientes escarpadas que domina la llanura por la cual corren los ríos Paglia y Chiani poco antes de confluir en el Tíber.

  1. Historia
  2. Iglesia de San Domenico

1. Historia

Luego de su primer período como maestro en París, Tomás se dirigió a Italia a principios del mes de junio de 1259, donde se celebró el Capítulo General de los dominicos. El santo participó en la comisión encargada de promover los estudios. Después de esta participación en el Capítulo General, santo Tomás tuvo un tiempo de relativa calma que le permitió avanzar en la redacción de la Summa Contra Gentiles, tarea comenzada antes de abandonar París[116]. Sin embargo, esto no significa que no hubiese tenido otras obligaciones: su nuevo oficio de Predicador General lo había convertido en miembro de derecho de los Capítulos Provinciales, e impuesto la obligación de participar de sus sesiones.

El 14 de septiembre de 1261, santo Tomás fue nombrado Lector en el convento dominico de Orvieto. El Lector conventual estaba encargado de asegurar la formación permanente según las recomendaciones del Capítulo General. Tomás tuvo pues que dedicarse, a la enseñanza regular de aquellos a los que se llamaban “Hermanos comunes”, es decir, todos los que no habían podido estudiar en el Studium generale, con el objetivo de prepararlos mejor para las dos misiones principales confiadas a los dominicos por el Papa Honorio III: la predicación y la confesión[117].

Paralelamente a la enseñanza, Tomás trabajó comentando la Sagrada Escritura para sus hermanos. Sus biógrafos sostienen que se trató del Comentario al libro de Job, uno de los más bellos comentarios escriturísticos que el Angélico nos ha legado[118].

Si dirigimos la atención al resto de las obras de este período, queda de manifiesto su intensa actividad literaria. No podemos detenernos en cada una, pero es de destacar la Catena Aurea, emprendida a petición del papa Urbano IV. Si bien, la última parte de la obra la concluyó en Roma, entre 1265 y 1268, Tomás comenzó su trabajo entre los años 1262 y 1263, ya que la sección de Mateo la concluyó 1264[119].

En este fecundo período en Orvieto se sitúa también la composición del Oficio de Corpus Christi. A raíz del milagro eucarístico de Bolsena, ocurrido en 1263 en la Iglesia de santa Cristina, muy cerca de Orvieto, Urbano IV asigna a santo Tomás escribir el Oficio y los textos propios de la  Misa de dicha fiesta. El texto definitivo fue compuesto en 1264, y promulgado por Urbano IV con la bula Transiturus, con la que instituyó para toda la iglesia universal, la fiesta en honor al Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo con carácter de solemnidad[120].

2. Iglesia de san Domenico

  • GOOGLEMAPS: Iglesia de san Domenico
  • Dirección: Piazza Ventinove Marzo, 13A, 05018 Orvieto TR.
  • Horario: lunes a domingo 8:30 h-18:00 h en horario invernal y hasta las 19:00 h en el verano.
  • Contacto: Don Luca (párroco).
  • Teléfono (WhatsApp): +393478094397.

Fachada de la Iglesia de san Domenico

El convento de la Orden de Predicadores en Orvieto fue construido después de 1230, y puesto bajo el patrocinio de santo Domingo en 1234, año de su canonización. Junto al convento se erigió una gran iglesia, dedicada también a santo Domingo.

No ha quedado nada del claustro original, que estaba situado, probablemente, frente a la actual fachada gótica de la iglesia. La iglesia estaba dividida en tres naves, pero hoy sólo se conservan el ábside y el brazo derecho del crucero. El resto del cuerpo de la iglesia fuera demolido en 1932 para la construcción de la Academia Femenina de Educación Física. En la actualidad, ese conjunto de edificios alberga el centro de formación especializada de la Guardia di Finanza.

En el interior de la iglesia, en una capilla lateral, se conserva la cátedra, desde la que santo Tomás impartía sus clases de teología durante su residencia en esta ciudad, y una cruz, también de su propiedad.

Cátedra desde la que santo Tomás impartía sus clases de teología

Aunque posterior al tiempo de santo Tomás, no se puede dejar de visitar el imponente Duomo, una de las construcciones románico-góticas más importantes de Italia. Iniciada en 1290 por Fray Bevignate según un diseño de Arnolfo di Cambio, fue terminada solo a mediados del siglo XVI. En su interior alberga el corporal del milagro de Bolsena, milagro que dio origen a la fiesta litúrgica del Corpus Christi.

Es de apreciarse también la capilla de san Brizio, decorada con frescos famosísimos de Luca Signorelli. Allí, entre los santos doctores de la Iglesia, aparece representado santo    Tomás.

Para reservar la Misa en la capilla del milagro enviar un mail a:

  • culto@duomodiorvieto.it
  • Tel: 0763341167
  • Sitio web: https://www.duomodiorvieto.it/
  • Las visitas guiadas se reservan preferentemente por email, aunque pueden hacerse también por teléfono. Hay que decir específicamente que se desea una visita catequética guiada por las religiosas. La Misa puede celebrarse en italiano, español o portugués, y los celebrantes deben presentar sus licencias.

Fachada del Duomo de Orvieto

IV. Lugares tomistas fuera de Italia

A. Colonia y París

Terminados sus estudios en Nápoles santo Tomás fue enviado al norte de Europa para realizar estudios superiores. Algunos sostienen que el primer destino fue la Universidad de París, donde habría estado desde 1245 hasta 1248. En 1248, después de la fundación del Studium generale en Colonia bajo la dirección de Alberto Magno, el Angélico asistió a los cursos de teología para su preparación inmediata al sacerdocio.

Gracias a la insistencia de san Alberto, el superior general de la Orden llamó a Tomás a París en 1252, para que ocupara la cátedra vacante de Teología, cátedra que los dominicos poseían en la universidad de esa ciudad.

Después de amargas disputas fomentadas por la oposición de maestros seculares, el Aquinate obtuvo en junio de 1255, ayudado por la intervención directa del Papa Alejandro IV, la licencia para enseñar. Sin embargo, al igual que el franciscano Buenaventura, no fue admitido en el colegio de profesores hasta el 15 de agosto del año siguiente (1256), iniciando su enseñanza como magister regens en el siguiente mes de octubre.

Este primer magisterio parisino (1256-59) se vio perturbado por el ataque continuo de los maestros seculares, dirigidos por Guillermo de Saint-Amour, que intentaban impedir el ingreso de las órdenes mendicantes en la Universidad. Santo Tomás se encargó de responder con sólidos fundamentos teológicos a los ataques, lo cual enfureció aún más a sus perseguidores. La Iglesia, finalmente, salió en defensa de los religiosos y condenó a Guillermo de Saint-Amour.

Tomás regresó a Italia en 1259, y luego de una larga estancia en su país natal, viajó nuevamente a París en enero de 1269. Este segundo magisterio parisino fue el período más agitado de su vida, caracterizado por sus difíciles disputas en todos los frentes: primero el estallido del averroísmo en la Facultad de Letras, y luego la lucha abierta contra su formación aristotélica, que culminó con la tormentosa disputa de 1270 en presencia de Stefano Tempier, obispo de París. Este altercado abrazó las principales tesis del tomismo, en particular el de la unicidad de la forma sustancial.

Durante su residencia en París Tomás vivió en el convento de Saint Jacques, ubicado junto a la Sorbona. El edificio, construido en el siglo XIII, fue destruido completamente durante la revolución francesa. Sin embargo, han quedado algunos puntos de interés que marcan el paso de Tomás por París, como la Sorbona, en cuya su fachada destacan las esculturas de santo Tomás a la izquierda y Pedro Lombardo a la derecha.

Se puede visitar también la actual Iglesia de Saint Étienne du Mont, junto al Panteón de París, en la que se aprecia una placa en honor y memoria de los santos y beatos de la Orden de Predicadores que residieron en París, en el convento establecido allí en 1218. El primero de la lista es santo Domingo, a quien siguen, entre otros, san Alberto Magno y santo Tomás de Aquino.

En Colonia se puede visitar la Iglesia de San Andrés, donde funcionaba el Studium generale en el cual estudió santo Tomás, y en cuya cripta está la tumba de san Alberto Magno.

[1] Cf. Directorio de Formación Intelectual, 69.

[2] San Pablo VI, Lumen Ecclesiae, 1.

[3] Santo Tomás de Aquino, In Ioannem Ev. V, 6.

[4] San Juan Pablo II, Discurso al Pontificio Ateneo Internacional “Angelicum” con motivo del primer Centenario de la Aeterni Patris (17/11/1979).

[5] Juan XXII, Alocución al Consistorio (14/7/1323).

[6] Directorio de Formación Intelectual, 69.

[7] Fides et Ratio, 44.

[8] Carta del Santo Padre al Enviado especial en la Celebración del 700 aniversario de la canonización de santo Tomás de Aquino (18/7/2023).

[9] Ibidem.

[10] Cf. Flp 13,14.

[11]  La Terra di Lavoro era una región histórico-geográfica del sur de Italia, también identificada en el pasado como Campania Felix, que incluía parte del Latium adiectum y del Sannio. Posteriormente se subdividió en las actuales regiones de Campania, Lazio y Molise.

[12]  Ver genealogía de santo Tomás en el Apéndice I página 147.

[13]  Cf. Walz, A., I Luoghi di san Tommaso. Ed. Herder, Roma 1961, p. 21-22.

[14]  Torrell, J. P., Iniciación a Tomás de Aquino: su persona y su obra. Ed. Eunsa, Roma 2002, p. 19.

[15]  Da Tocco, G., Ystoria sancti Thome Aquino, Pontificial Institute of Medieval Studies, Toronto 1996, p. 97. Las traducciones son nuestras.

[16]  Cf.Torrell, J. P., op. cit., p. 22.

[17]  Da Tocco, G., op. cit., p. 98.

[18]  Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 29.

[19]19 Cf. Abbate, A., Roccasecca nel giubileo del duemile. S. Tommaso: I percorsi dello Spiritu, Ed. Telinform, Arpino 2000, p. 30.

[20]  Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 20.

[21]  Cf. Scandone, F., Roccasecca. Patria di S. Tommaso de Aquino, Arte Stampa, Roccasecca 2014, p. 89.

[22]  Abbate, A., op. cit., p. 34.

[23]  Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 20.

[24]  Cf. Ibid., p. 310.

[25]  Colafrancesco, G.B., Aquino Cinquant’anni (1933-1983) Ed. La Voce di Aquino, Cassino 1983, p. 247.

[26]  Ministero della Cultura, .Commune d’Aquino. 2023

[27]Ministero della Cultura, .Commune d’Aquino. 2023

[28] Ministero della Cultura, .Commune d’Aquino. 2023

[29] Canetri Elisa (Curatrice), Il complesso monumentale dei Conti d’Aquino, Ministero della Cultura, Aquino 2023, p. 246.

[30]  Cf. Colafrancesco, G.B., op.cit., p. 26-32.

[31]  Cf. Ibid., p. 53. Los restos mortales de santo Tomás se conservan en el Convento de los Jacobinos de la ciudad de Toulouse.

[32]  Cf. Ibid., p. 277-280.

[33]  Desideriana hace referencia al Abad Desiderio de Montecassino (luego papa Victor III) quien gobernó el monasterio en el siglo XI, época de gran esplendor

[34]  Cf. Colafrancesco, G.B., op.cit., p. 54.

[35]  Cf. Ibid., p. 54-55.

[36]  Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 22.

[37]  Cf. Walz, A., op. cit., p. 29.

[38]Ibid., p. 34.

[39]  Cf. Ibid., p. 35.

[40]  Cf. Walz, A., op. cit., p. 37.

[41] Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 23.

[42]Cf. Walz, A., op. cit., p. 39.

[43]Cf. Dell’Omo, M., Montecassino. Un’abbazia nella storia. Publicazioni Cassinessi, Montecassino 1999, p. 15.

[44]Cf. Ibid., p. 29.

[45]Cf. Ibid., p. 127.

[46]Cf. Walz, A., op. cit., p. 40.

[47]Cf. Fabro, C., Introduzione a san Tommaso. La metafisica tomista e il pensiero moderno. EDIVI, Segni 2016, p. 36.

[48] Da Tocco, G., op. cit., p. 113.

[49]Cf. Walz, A., op. cit., p. 55.

[50]Cf. Da Tocco, G., op. cit., p. 159-160.

[51]Cf. Walz, A. op. cit., p. 56.

[52]Cf. Angelucci D. – Coladarci, C., Il Museo della cattedrale di Anagni. La guida storico-artistica. Ed. Efesto, Roma 2018, p. 29.

[53]Cf. Ibid., p. 107.

[54] Cf. Ibid., p. 83.

[55] Cf. Walz, A., op. cit., p. 106.

[56] La actual ciudad de Priverno

[57] Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 310.

[58] Cf. Ibid., p. 311.

[59] Cf. Walz, A., op. cit., p. 111.

[60]Cf. Pucci, A., Il castello di Maenza e San Tommaso d’Aquino, Leo Orsini Editore, Latina 2012, p. 5.

[61] Cf. Ibid., p. 8.

[62] Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 312.

[63] Cf. Walz, A., op. cit., p. 113.

[64] Relato cisterciense, que se encuentra escrito en el muro de la habitación donde murió el santo.

[65] Cf. Walz, A., op. cit., p. 114.

[66] Torrell, J. P., op. cit., p.312-313.

[67]2 Tim 4, 7-8.

[68]Cf. Angelini E., San Tommaso d’Aquino e la sua incidenza sulla storia di Priverno.  Tipografía Selene, Priverno 2023, p. 59-61.

[69]Cf. Berger-Dittscheid, C., Fossanova. Architektur und Geschichte des ältesten Zisterzienserklosters in Mittelitalien. Ed. Hirmer, München 2018, p. 62.

[70]Cf. Angelini E., Contributo alla Storia di Fossanova: L’Abbazia nei secoli XVII e XVIII, Tipografía Selene, Priverno 2015, p. 15.

[71]Cf. Berger-Dittscheid, C., op. cit., p. 85.

[72]Cf. De Rossi G.M., Fossanova e San Tommaso. Sulle orme di San Tommaso d’Aquino a Fossanova: un percorso tra agiografia e topografia. Ed. Espera, Roma 2013, p. 99.

[73]Cf. Berger-Dittscheid, C., op. cit., p. 30.

[74]Cf. De Rossi G.M., op. cit., p. 27.

[75]Cf. Ibid., p. 127.

[76]Cf. Angelini, E., op. cit., p. 115.

[77] Cf. Walz, A., op. cit., p. 121-122.

[78] Cf. Ibid., p. 106.

[79]Cf. Angelini, E., op. cit., p. 61.

[80]Cf. Angelini. E., La Cattedrale di Priverno. Il monumento. Tipografia Selene, Latina 2011, p. 19.

[81] Cf. Ibid, p. 23.

[82] Cf. Ibid, p. 43.

[83] Cf. Ibid, p. 88.

[84] Cf. Ibid, p. 75.

[85]Cf. Ibid, p. 43.

[86]Cf. Angelini, E., op. cit., p. 130.

[87]Cf. Walz, A., op. cit., p. 120-121.

[88]Cf. Gianandrea, M. e- D’Onofrio, M., Fondi nell medioevo. Gangemi Editore, Roma 2016, p. 121.

[89]Cf. Ibid., p. 122.

[90] Cf. Ibid., p. 126.

[91] Cf. Ibid., p. 132.

[92] Cf. Ibid., p. 134.

[93] Cf. Ibid., p. 139.

[94] Cf. Ibid., p. 140.

[95] Cf. Ibid., p. 142.

[96] Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 161.

[97] Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 163.

[98] Cf. Walz, A., op. cit., p. 73.

[99] Cf. Ibid., p. 57.

[100]Cf. Padri domenicani, Basilica de Santa Maria sobre Minerva, Sampa B. N. Marconi, Genova 2013, p. 4.

[101] Cf. Ibid., p. 16.

[102] Cf. Torrell, J. P., op. cit., p.24.

[103] Cf. Ibid., p. 27.

[104] Cf. Ibid., p. 118.

[105]Cf. Ibid., p. 165.

[106] Cf. Walz,A., San Tommaso d’ Aquino. Studi biografici sul Dottore Angelico. Edizioni Liturgiche, Roma 1945, p. 178.

[107]Ver página 127.

[108]Cf. Salerno, L., Il convento di S. Domenico Maggiore in Napoli. Padri Dominicani, Casoria 1997, p. 86.

[109]Cf. Dovere, U., La Capella del Tesoro di San Genaro. Arcidiocesi di Napoli, 24 Ore Cultura, Milano 2010, p. 68.

[110]Cf. Ippolito, G., I Culto barocco in San Domenico Maggiore a Napoli. Basilica San Nicola Editora, Bari 2018, p. 58-59.

[111]Cf. Torrell, J. P., op. cit., p. 310.

[112]Cf. Walz, A., San Tommaso…, op. cit., p. 180.

[113]Cf. Da Tocco, G., op. cit., p. 208.

[114]  Cf. Walz, A., Luoghi…, op. cit., p. 90.

[115]  Cf. Ibid., p. 97.

[116]  Cf. Torrell, J. P., op. cit, p. 119.

[117]  Cf. Ibid., p. 136.

[118]  Cf. Ibid., p. 138.

[119]  Cf. Ibid., p. 155.

[120]  Cf.Ibid., p. 149.

 

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