CAPÍTULO XCVII: Dios es viviente

CAPÍTULO XCVII

Dios es viviente

Es una consecuencia necesaria de lo expuesto que Dios es viviente. En efecto:

Queda demostrado que Dios entiende y quiere. Pero el entender y querer son propiedad del viviente. Luego Dios es viviente.

El vivir se ha atribuido a algunos seres en cuanto que se les ve moverse por sí misales, no por otro. Y, por esto, las cosas que parecen moverse por sí mismas, cuyos motores no percibe el vulgo, decimos por analogía que viven; como llamamos agua viva a la que mana de una fuente, no a la detenida en cisterna o estanque, y plata viva a la que parece tener cierto movimiento. Mas propiamente sólo se mueven por sí las cosas que se mueven a sí mismas, compuestas de parte moviente y parte movida, como las animadas. Por donde decimos que sólo éstas viven propiamente, y todas las demás se mueven por algo exterior, sea por algo que engendra, o que quita los obstáculos, o que impulsa. Y como las operaciones sensibles se verifican con movimiento, se dice también que vive todo aquello que se activa a sí mismo a las operaciones propias, aunque no se verifiquen con movimiento; por donde entender, apetecer y sentir son acciones vitales. Pero Dios obra en grado sumo no por otro, sino por sí mismo, por ser la causa agente primera. Luego en grado sumo le compete a El vivir.

El ser divino, como ya se ha demostrado (c. 28), comprende toda la perfección de ser, pues los vivientes, en el orden de los seres, se prefieren a los no vivientes. Luego el ser divino es el vivir. Y, por consiguiente, es viviente.

Esto se confirma también con la autoridad de la divina Escritura. Pues se dice en el Deuteronomio por boca del Señor: “Vivo yo para siempre”; y en el Salmo: “Mi corazón y mi carne se regocijaron en el Dios vivo”.

Si encuentras un error, por favor selecciona el texto y pulsa Shift + Enter o haz click aquí para informarnos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.